La oleosidad de los cabellos es un problema que afecta a gran parte de la población en todo el mundo, pero nadie sufre tanto con eso como las mujeres. El cuero cabelludo con aspecto engordado es capaz de comprometer cualquier sobreproducción, dejando a la mujer con apariencia desleal.

Quien sufre con la oleosidad, enfrenta el problema en cualquier estación del año, pero el calor típico del verano brasileño intensifica la producción de aceite en el cuero cabelludo haciendo que los cabellos lavados por la mañana lleguen al final del día sin volumen y aparentando no ver agua hace días.

Si usted también sufre con este mal, sepa que algunos cuidados simples pueden ser tomados para amenizar y evitar problemas más serios como la dermatitis seborreica, una inflamación provocada por la gran producción de aceite y que contribuye a la caída de los hilos y aumento de la caspa.

Compruebe por debajo de doce consejos seleccionados para ayudarle a conquistar un cabello sano, ligero, hermoso y sin aceite.

1 - Lavar los cabellos con agua tibia o fría

Lavar los cabellos con agua a la temperatura correcta es fundamental para la salud de los hilos. El agua muy caliente ataca el cuero cabelludo estimulando las glándulas sebáceas a trabajar más para protegerlo de esa agresión y cuando ellas trabajan más, la producción de aceite aumenta.

Al contrario de lo que muchos creen, los cabellos grasosos no deben ser lavados a diario, lavarlos en días alternos ya es suficiente.

2 - Elegir los champús adecuados

Xampus para el cabello aceitoso no deben ser usados ​​constantemente, pues causan el mismo efecto del agua caliente, resecando el cuero y estimulando las glándulas sebáceas a producir más aceite para hidratar la fibra capilar. Alterne el lavado con champú para cabellos grasosos en un lavado y champú neutros con PH balanceado en otro. Los champús antirresivos y astringentes deben usarse preferentemente cuando los hilos estén muy sucios como máximo dos veces por semana.

3 - Mucha atención al uso del acondicionador

No se recomienda el uso de acondicionadores en el cuero cabelludo. El producto debe ser aplicado directamente en las manos y pasado de la longitud hasta las puntas de los hilos, siempre enjuagando bien para no dejar ningún residuo. Dispense la utilización de productos del tipo 2 en 1 (champú + acondicionador), y principalmente cremas sin enjuague.

4 - Manténgase atento a la alimentación

La alimentación influye directamente en la grasa del cabello. El consumo en exceso de carbohidratos, derivados de la leche y los alimentos grasos puede agravar el problema. Por eso, elija una alimentación balanceada, incluyendo frutas, verduras y vegetales en su menú y dispensando alimentos grasos y frituras.

5 - Secador, chapita y babyliss

No existe ningún estudio que demuestre que el uso de estos aparatos aumente la grasa de los hilos. Lo ideal es que los cabellos se sequen sueltos y naturalmente, pero si usted no renuncia al secador, manténgalo a una distancia de al menos 15 cm para que el calor no estimule las glándulas sebáceas. Antes del proceso, aplique productos termo-activados que protegen los hilos del calor intenso.

6 - Quita las manos del cabello

Pasar las manos por el pelo jugándolas de un lado a otro puede ser un encanto e incluso una manía, pero si tienes el pelo graso, evite hacerlo. Los residuos presentes en las manos contribuyen con el aumento de la oleosidad y ensucian los hilos más rápidamente. Si usted no puede mantener las manos lejos de los cabellos, la solución es sostenerlos de vez en cuando.

7 - No abuse de los accesorios

Usar gorras y pañuelos con frecuencia también aumenta la oleosidad de los hilos. Esto ocurre porque el cuero cabelludo termina siendo sofocado, aumentando así la producción natural de aceite. Si usted ya tiene el pelo graso, evite el uso frecuente de sombreros, pañuelos y cualquier otro accesorio que pueda sofocar el cuero.

8 - Productos que usted debe evitar

Quien tiene los pelos aceitosos debe evitar productos sin enjuagarse como ceras, pomadas, cremas para peinar, siliconas y aceites en exceso. Para modelar los cabellos, prefiera el uso de gel y mousse. Usted también puede utilizar leave-in aplicándolo solamente del medio del pelo hasta las puntas para proteger los hilos contra el exceso de contaminación y los rayos ultravioleta.

9 - Trate los hilos

Los pelos aceitosos, así como los otros tipos, también necesitan hidratación, principalmente para evitar el debilitamiento de los hilos. La novedad para los hilos oleosos es la argiloterapia, un tratamiento a base de arcilla sulforosa, rica en sales minerales como calcio, potasio, hierro, cinc, magnesio, sílice y sodio, que exfolia y trata la fibra capilar recuperando la salud del cuero cabelludo y de los hilos. La caspa aparece en todos los tipos de cabello y son características de problemas en el cuero cabelludo en general, pero la oleosidad en exceso asociada a la acción de un hongo llamado Malassezia, que está presente en la piel de todos nosotros, que hace el cuero más propenso a la formación de la caspa. Usar champús anticaspa y evitar dormir con los cabellos mojados puede ayudar en el control.

11 - Cuidado con el uso de talco

Si de última hora tiene que disfrazar la caspa, usted puede recurrir al talco, que disfraza la apariencia aceitosa, pero el riesgo del cuero cabelludo presenta rechazos y provocar picazón es grande. Tome el mismo cuidado con productos como post matificantes y sprays de champú seco. Ambos deben ser usados ​​esporádicamente y con parsimonia.

12 - Relajarse

Las personas que se encuentran estresadas, tienden a producir mayores tasas de aceite en el cuero cabelludo, por lo que mantener la calma y relajarse en las tareas cotidianas es bueno no sólo para el corazón, pero también para el cabello .

Ahora usted ya tiene información preciosa para cuidar de los cabellos y combatir la oleosidad, pero si su caso es extremo, del tipo que causa incómodas y limitaciones mayores, busque un dermatólogo. Se analizará su caso, descubrir el origen del problema e indicar lociones específicas para su tratamiento.