Imagine la vida sin pan, pasteles, cojines, pizzas, macarrones y una serie de otras delicias hechas con harina de trigo, por ejemplo. Difícil, ¿no es así? Y estas son sólo algunas de las restricciones en la dieta de miles de personas que sufren de intolerancia al gluten.

A continuación usted puede aclarar algunas de las principales dudas sobre la enfermedad y entender un poco más sobre el tema.

¿Qué es la enfermedad celíaca?

La enfermedad celiaca o intolerancia permanente al gluten es una enfermedad autoinmune que afecta principalmente al intestino delgado.

Cuando el individuo celíaco ingiere gluten, el organismo reacciona contra sí mismo causando daños en las paredes que revisten el intestino delgado, perjudicando la absorción de los nutrientes que no llegan donde deberían llegar y desencadenando una serie de reacciones.

¿Qué es el gluten?

El gluten es la principal proteína del trigo, de la avena, del centeno, de la cebada de la malta y de los derivados de cada uno de ellos.

Esta proteína está presente en gran parte de los alimentos y también en medicamentos, bebidas industrializadas, cosméticos y otros productos fabricados con estos cereales.

Todavía no hay ninguna técnica para retirar el gluten de los alimentos, por lo que, incluso cuando están asados ​​o cocidos, sigue presente.

¿Cuáles son los datos estadísticos de la enfermedad?

Aunque es poco conocida, la enfermedad celíaca es considerada común en Brasil, pero la falta de información y dificultad para diagnosticar el problema disminuye la demanda por especialistas y, consecuentemente, las posibilidades de mejora de la calidad de vida de los celíacos. En los Estados Unidos y en Europa, se estima que en un grupo de 100 a 200 personas, 1 es celíaca. En Brasil, no existen datos oficiales, pero en una encuesta publicada por la UNIFESP en 2005, en un estudio realizado con adultos donantes de sangre, el resultado presentó una incidencia de 1 celíaco para cada grupo de 214 habitantes de São Paulo. Según la Federación Nacional de las Asociaciones de Celíacos de Brasil, más de un millón de brasileños tienen la enfermedad y no lo saben.

¿Cuándo se manifiesta la enfermedad?

La enfermedad generalmente se manifiesta en los primeros años de vida, tan pronto como el gluten se inserta en la dieta de los bebés, pero existen casos en que la intolerancia se manifiesta sólo en la fase adulta.

¿Quién puede desarrollar la enfermedad?

No es posible afirmar si la persona tendrá o no la enfermedad, pero según investigaciones, la probabilidad de desarrollar la enfermedad es mayor entre las mujeres, en una proporción de una mujer por cada dos hombres celíacos, además de personas con diabetes tipo 1 , problemas de tiroides, síndrome de Turner, síndrome de Williams o parientes de primer grado de celíacos.

¿Cuáles son los síntomas?

Existen excepciones, pero el síntoma más común de la enfermedad celíaca es la diarrea crónica caracterizada por heces líquidas o blandas de color claro, que pueden indicar que el intestino no está absorbiendo los nutrientes.

Además, una serie de otros problemas pueden tener relación directa con la enfermedad, como estreñimiento, hinchazón abdominal, flatulencia, irritabilidad y poco aumento de peso, retraso de crecimiento y de la pubertad debido a la deficiencia de nutrientes, anemia de carencia de hierro, osteoporosis, infertilidad, abortos espontáneos de repetición, desnutrición e incluso trastornos neurológicos.

En los bebés, puede causar pérdida de masa grasa y comprometer el crecimiento. La enfermedad celiaca también puede presentarse en su forma asintomática, es decir, sin síntomas, lo que puede ser peligroso, pues si no se trata, la enfermedad puede desencadenar problemas como cáncer intestinal, anemia, osteoporosis, anemia, abortos de repetición y esterilidad .

¿Cómo se realiza el diagnóstico?

Para diagnosticar la enfermedad, se realizan una serie de exámenes de sangre para detectar la presencia de anticuerpos relacionados, pero para un resultado más preciso, es necesario que se haga un análisis que verifique el cambio en los vellos que revisten las paredes del intestino delgado, y eso sólo puede ser hecho a través de una endoscopia con biopsia que retira pequeñas muestras del tejido para ser analizadas.

En cuanto se efectúa el diagnóstico, en caso positivo, se recomienda que el celíaco pase por una consulta con el nutricionista para recibir toda la información necesaria para comenzar una nueva dieta.

¿Cómo se hace el tratamiento? La única manera de tratar la enfermedad es eliminar el gluten, siguiendo una dieta rigurosa, es decir, nada de panes, pasteles, galletas, cojines, quioscos, pizzas, cervezas, whisky, vodka, y cualquier otro alimento que poseen el mismo. gluten en su composición o proceso de fabricación.

Habitualmente, la dieta celíaca está compuesta en su mayor parte de grasas (margarina, mantequillas, aceites) y proteínas (carne en general) y en menor proporción de carbohidratos (masas sin gluten, azúcares).

Para tener una dieta equilibrada, los celíacos deben controlar la ingesta de proteínas, moderar el consumo de grasas y aumentar el consumo de frutas, jugos naturales, verduras y verduras.

Como es un proceso similar al de una alergia, cualquier cantidad, por mínima que sea, de gluten ingerido es suficiente para activar la enfermedad.

Pocos días después de cortar el gluten de la alimentación, los síntomas comienzan a desaparecer y en promedio dentro de un año las mucosas del intestino se normalizan, pero conseguir eliminar el gluten de la dieta es muy difícil, principalmente para niños y adolescentes. La alternativa es sustituir los productos prohibidos por derivados del maíz, como almidón de maíz, harina de maíz, fubá, derivados del arroz, como la harina de arroz, derivados de la patata, tal como la fécula de patata, la mandioca, la harina, el polvillo y en el caso de las mujeres.

¿Cuál es la ley que ampara a los celíacos?

En 2003 con la ley 10.674, todos los alimentos pasaron a ser obligados a presentar en el embalaje la información "contiene gluten" o "no contiene gluten, pero no todas las industrias poseen tecnología para realizar exámenes que identifiquen la presencia o ausencia de la proteína .