La gestación - desde el descubrimiento hasta el momento del parto - es una fase muy importante en la vida de la mujer. Es un período que también requiere atención y cuidados especiales - cuidados estos que se extienden incluso para el período post-parto. Es en este contexto que muchas mujeres optan por contratar una doula -que es, de forma resumida, la mujer que da soporte físico y emocional a la gestante antes, durante y después del parto.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) y el Ministerio de Salud de varios países (como Brasil) reconocen la profesión de doula y alientan el apoyo de la doula en el parto.

El papel de la doula es, resumidamente, ofrecer confort, tranquilidad, aliento, apoyo emocional y físico y también información a la gestante durante ese período de intensas transformaciones que ella está viviendo.

Hay muchas dudas y confusiones en torno a esta importante profesión. Muchas mujeres no saben, por ejemplo, lo que una doula hace y lo que una doula no puede hacer. A continuación, Alaya Dullius de Souza, acupunturista, doula y madre, aclara las principales cuestiones sobre el asunto.

¿Qué es una doula? De acuerdo con Aláya, la doula es una figura femenina que llena la brecha creada en el ambiente hospitalario de la presencia de una mujer apoyando a otra mujer. "El papel de la doula es servir a la mujer en trabajo de parto, ella proporciona apoyo informativo - considerando que el conocimiento y el acceso a buenas informaciones traen una forma más segura y consciente de hacer elecciones -, quitando dudas y ayudando a la mujer en el transcurso del proceso prenatal a entender sus deseos y qué hacer para alcanzarlos ", dice.

Durante el parto, añade Aláya, la doula da soporte físico y emocional y se hace disponible para la gestante siempre que ella lo necesite. "Es aquel hombro amigo que entiende del asunto, que no va a asustar con historias ni mitos, que va a acoger y explicar, respetar y abrazar. Mientras están todos preocupados por procedimientos técnicos y con el bebé, la doula tiene foco en la madre ", explica.

Y siendo una profesional entrenada, destaca Aláya, la doula tiene una mirada acostumbrada al parto. "Eso calma incluso a los padres presentes, pues actúa como una guía paso tras paso, acogiendo las emociones de la mujer, sugiriendo posiciones, sirviéndola en lo que ella necesita - sea una toalla fría en la frente para secar el sudor, sea alcanzar un vaso de agua, o masajes durante las contracciones ", dice. La doula es como un "personal trainer de parto", compara Aláya. "Ella está allí para la mujer, y cree profundamente en la fuerza de esa mujer, y da fuerza verbal para que ella siga adelante, incluso cuando todo parece difícil, y tiene brazos fuertes para apoyar a la mujer físicamente", dice. "Es alguien que está allí para lo que usted necesita, pero con una mirada entrenada y atento a las etapas del trabajo de parto", añade.

Lo que la doula hace X lo que no hace

Lo que una doula hace:

Ofrece soporte físico y emocional, haciéndose disponible para la gestante siempre que ella lo necesite.

En el momento del parto, especialmente, se mantiene presente al lado de la parturienta, ofreciendo apoyo emocional, aliento y tranquilidad. Favorece el mantenimiento de un ambiente agradable, acogedor, con silencio y privacidad.

Sugiere posiciones para que la parturienta se sienta más cómoda, ofrece además otras medidas de confort físico, como masajes, relajaciones, técnicas de respiración, baños.

  • Ofrece información, explicando términos médicos, los procedimientos hospitalarios, derribando mitos acerca del parto, etc.
  • Antes del parto, la doula orienta a la pareja sobre lo que espera del parto y también del posparto. Ayuda a la gestante a prepararse física y emocionalmente para esos momentos.
  • La doula puede todavía estar presente en el posparto, ayudando a la madre en su contacto con el recién nacido y en cuanto a la lactancia.
  • Aláya destaca que la doula:
  • No hace procedimientos médicos o de la enfermería, como examen de tacto, medición de la presión arterial, verificación de los latidos del corazón del bebé.
  • No es papel de la doula ejecutar ningún procedimiento técnico ni aplicar ningún tipo de medicación. La doula tampoco toma ninguna decisión por la parturienta, pero acoge las voluntades de ésta y alienta a la mujer en sus elecciones, ayudándola a recibir las informaciones necesarias para tomar decisiones conscientes.

La doula no sustituye al acompañante de elección de la parturienta.

  • Las ventajas de tener una doula para auxiliar la venida del bebé
  • La doula ofrece soporte físico, emocional e informativo a la gestante. Y, de acuerdo con Aláya, las investigaciones han mostrado que la actuación de la doula en el parto puede:
  • Disminuir en 50% las tasas de cesárea;
  • Disminuir en un 20% la duración del trabajo de parto;

Disminuir en un 60% las solicitudes de anestesia;

Disminuir en un 40% el uso de la oxitocina;

  • Disminuir en un 40% el uso de forceps. "Hay una frase por John Kennell que dice que 'Si la doula fuera un remedio, sería antiético no recetar'. La presencia de una doula en el parto puede hacer la experiencia más satisfactoria para la mujer ", subraya Aláya.
  • Doula no es partera
  • Esta es una duda bastante común entre las personas: ¿cuáles son las diferencias entre una doula y una partera? Mucha gente todavía confunde las funciones.
  • Sin embargo, tienen papeles extremadamente diferentes. "La doula no tiene ninguna responsabilidad legal y técnica en relación al parto. "Ella no presta asistencia al parto, ella no es necesariamente un profesional de la salud", destaca Aláya.
  • Ella ayuda y apoya a la mujer en el trabajo de parto, dando apoyo físico y emocional. "Podemos decir que quien 'hace' el parto es la propia mujer, pues depende de ella y sucede en el cuerpo de ella, mientras que la partera (sea una partera tradicional, una enfermera obstetra, obstetriz o obstetra) asiste al parto (preservando la salud de la salud madre y del bebé), y la doula asiste a la mujer (proveyendo todo lo que ella necesita en el momento). Mientras el equipo está ocupado con el monitoreo de la madre y del bebé, las evaluaciones y el cuidado con la salud, la doula está ocupada con la madre ", explica Aláya.

El papel de la doula en el parto humanizado

La doula tiene papel fundamental en el parto humanizado, que es, de forma resumida, un término que define el retorno de las prácticas humanas, desde el nacimiento hasta la recepción del bebé, y también en los posparto ... que ve a la mujer como protagonista de su parto y de su gestación en general, sabiendo que, como humana, ella tiene sus instintos y que el parto es un proceso fisiológico y no algo que siempre necesite intervenciones. Aláya destaca que, antes del parto, la doula orienta a la gestante sobre lo que espera, explica como sucede el trabajo de parto, y la prepara para los detalles de esa jornada. "Explica los procedimientos, ayuda en la elección del equipo, quita dudas, como una guía que da un 'mapa' del camino, para que la gestante pueda preparar su 'mochila' y saber por dónde va a pisar ', dice.

Durante el parto, la doula es la persona que muchas veces va a adivinar lo que la mujer necesita, añade Aláya. "Ella va a procurar garantizar su bienestar físico y emocional, su confort térmico, su alimentación e hidratación, y principalmente dar apoyo en las posiciones, sonrisas en los dolores, palabras de incentivo, y va a traducir lo que está pasando, funcionando como una" la interfaz entre los términos médicos y la parturienta ", dice.

La doula va a ambientar el lugar para que se vuelva más acogedor, destaca Aláya, o ayudar a la mujer a relajarse con respiraciones y proponer medidas no farmacológicas para aliviar los dolores, sea sugerencias de ir a la ducha, posturas o masajes. "En el posparto, la doula suele visitar a la familia y auxiliar en la lactancia y primeros cuidados con el bebé", añade Aláya.

¿Cómo encontrar una doula?

La mejor forma de encontrar una doula es buscar grupos de apoyo a la gestación y parto humanizado en su ciudad, como explica Aláya. "Generalmente son grupos coordinados por doulas, que conocen otras doulas. Grupos en Internet y algunos sitios también reúnen el contacto de algunas doulas, experimentados o principiantes ", dice.

La mayoría de la gente contrata la doula por indicación, el viejo "boca a boca", añade Aláya. "Muchas doulas comienzan actuando de forma voluntaria, para ganar experiencia, ayudando a amigas o voluntariando en hospitales públicos. Cada doula actuará a su propia manera y tener sus 'paquetes' de atención (las visitas y encuentros pre y post-parto, la atención al parto), lo importante es encontrar una con quien usted tenga afinidad y sienta confianza, después de todo ella estará allí para usted en un momento fundamental en su vida ", destaca Aláya.

Aún de acuerdo con la profesional, los valores varían de R $ 500 a R $ 2.000, dependiendo de la región del país, de la experiencia de la doula y de la que ella agrega en su atención.

¿Quién puede convertirse en una doula? Aláya destaca que cualquier mujer con un profundo deseo de ayudar a otras mujeres, y total confianza en la fisiología del parto, de que es posible para las mujeres parir de forma transformadora, puede convertirse en una doula. "Para convertirse de ella es importante comprender que la gestante es la protagonista de su parto, y nosotros somos sólo coadyuvantes dispuestos a entregarnos a una acción de profundo cuidado y cariño, que puede llevar pocas horas, o muchas, que puede exigir que nos quedamos despiertos a la madrugada entera, nos mojamos en la ducha y se probamos física y emocionalmente ", destaca Aláya.

Una doula no necesita ser necesariamente una activista, pero ella no debe aceptar en su íntimo las injusticias y todo de mal y violento que ella ve en el sistema obstétrico vigente, resalta Aláya. "El compromiso de la doula es con la mujer, y sólo con ésta", dice.

La doula explica que existen cursos de doulas en diversas ciudades brasileñas, y ellos dan una preparación inicial, pero la mujer debe procurar también estudiar mucho por ella misma, y ​​procurar estar siempre actualizándose. "Al final de cuentas, la doula es sólo una sierva, pero para eso hay que saber servir bien, y eso incluye respetar las decisiones de la mujer incluso cuando ellas no son las que usted tomaría para sí, e incluye saber explicar los hechos incluso cuando estos pueden desagradar a la gestante, pues lo que queremos es ayudar a las mujeres a hacer sus propias elecciones de forma consciente ", finaliza Aláya.

Declaraciones de quienes ya contaron con ayuda de la doula

Cecilia Nassin, abogada, de 35 años, cuenta que decidió que quería una doula para su primer parto, al inicio de la gestación, cuando empezó a interesarse más por el parto natural. "Buscaba y ya había intercambiado e-mails con algunas doulas, pero cuando conocí personalmente una de ellas, tuve la certeza de mi elección ... Ella era una persona óptima", dice.

Cecilia cuenta que ella y la doula se hablaban casi que diariamente durante la gestación, o por teléfono, o por mensaje, además de los encuentros (personalmente). "Ella fue importante en todas las fases, pero sobre todo en la fase final, cuando me sentía muy ansiosa. Pero ella me calmó demasiado ", dice. "El día del parto, entonces, sin comentarios ... Mi doula me ayudó en todos los sentidos, fue mi 'puerto seguro'. Ella me ayudó para que todas mis voluntades fueran respetadas. Sólo tengo que agradecer por tenerla a mi lado, y guardo grandes recuerdos de mi gestación y también de mi parto ", cuenta Cecilia.

Amanda Furlan, educadora física, de 32 años, cuenta que siempre se interesó por la profesión de doula y no tenía dudas de que quería el acompañamiento de una cuando fuera a tener a su bebé. "Mi doula que, en realidad, ya era también una amiga mía, fue fundamental para mí. Me quitó todas mis dudas, me calmó cuando era necesario ... Era encantador cuánto entendía del asunto, cuánto me pasaba tranquilidad. Tanto que, en el momento del parto, creo que no estaba muy ansiosa, con miedo. Y ella estuvo allí a mi lado todo el tiempo, fue muy bueno ", relata.

Ahora ya conoces más sobre la profesión de doula, sabes lo que puede o no hacer y, sobre todo, cómo puede hacer la diferencia durante toda la gestación y, especialmente, en el momento del parto.