La mayoría de los correos electrónicos que recibo son de mujeres que no logran superar el fin de una relación y que ven el hecho de estar solas como una batalla perdida. Forma parte de nuestra cultura la mujer sólo tiene éxito si tiene un compañero, hijos, etc., no importa si ella está

feliz sola , si tiene universidad, posgrado, un buen empleo, una gran familia y super amigos , nada de eso tiene valor si ella no tiene a alguien de su lado. En los dibujos infantiles, películas y novelas, todo termina en matrimonio, hijos y en el famoso "fueron felices para siempre". Hasta Vinicius de Moraes en su música Wave dice que "es imposible ser feliz solo". Y quien nunca oyó frases del tipo: "estoy buscando la tapa de mi olla" o "la mitad de mi naranja".Creamos la falsa idea de que somos seres incompletos y por eso vamos a pasar toda la vida tratando de encontrar esa otra mitad. Con el fin de la relación

(perdimos) y volvemos a ser "incompletos", como si estuviera sola, era una deficiencia que causa vergüenza y por eso es común evitar las fiestas de familia con miedo "de aquella" tía "fofoqueira" preguntar de la novio, vergüenza de los amigos, de los vecinos y hasta del perro que haga aquella carita de que está con do de usted. Nos escondimos, nos culpamos y sufrimos, sufrimos mucho.

Muchas veces el dolor no es por la persona que perdemos, sino por la soledad que ocasionó. La cuestión es que si no tenemos la felicidad solos no la conseguiremos acompañados, pues el miedo de la soledad es tan grande que sofocamos una relación que podría salir bien (celos) o en el peor de los casos aceptar cualquier tipo de relación (violencia).

No estoy diciendo que debemos estar solos, pero que nuestra felicidad no puede depender del otro, por eso necesitamos tener independencia emocional, que surge con una mejor autoestima. ¿Consiguió una tarde de descanso en el trabajo? ¿Por qué no aprovechar el cine vacío o sentarse en un café para apreciar la vida, en lugar de ir a casa porque no tiene compañía. Si usted está solo por opción o acaso del destino, aproveche ese momento para conocerse, disfrutándose y amándose, pues nadie le cuidará mejor que usted. ¡Sé feliz!