Antes de cualquier cosa hay que saber que el psicólogo no es un amigo "pagado" y que a pesar de aparentemente ser una simple conversación, el terapeuta nunca da consejos o opiniones sobre qué hacer. El trabajo del terapeuta es auxiliar el autoconocimiento. En el caso de que una persona llegue a la terapia trae consigo un armario bastante "desordenado" y por consiguiente no logramos encontrar nada, por eso hay que ver qué ropa están limpias, las que están sucias, las que están sucias, las que no sirven más y las que no sirven más nunca usamos ni recordábamos que existían. Después de guardar el armario conseguimos ver lo que antes era difícil. Cuando estamos con el "armario desordenado" difícilmente conseguimos pensar y encontrar respuestas a lo que queremos, por eso es común que está fuera de ver más claramente que quien está dentro de la situación (relación conturbada, traición, etc). Entonces, en resumen el psicólogo no da las respuestas, pero ayuda a encontrarlas. Muchas veces, durante la búsqueda de respuestas nos encontramos con traumas que se han adquirido, es decir, somos hoy el resultado de todo lo que vivimos desde nuestro nacimiento. A veces una mujer traicionada que sufre de depresión no es más que la repetición de la vida que su madre tuvo, y que por no tener otro ejemplo cree que esa relación es común y que aquello es amor. Con la terapia es posible revivir el trauma y reelaborar de una forma positiva en el camino de la curación. Desafortunadamente no puedo afirmar que la terapia sea siempre agradable, pues revivir un trauma puede traer mucho sufrimiento, y algunas personas prefieren interrumpir las sesiones que enfrentar el dolor.

Es un acto de coraje seguir adelante, y algunos todavía no están preparados. Por eso, no basta ir al psicólogo porque funcionó para amiga o porque el marido quiere, la voluntad necesita partir de dentro y ante todo hay que tener conciencia de que cambiar da trabajo. Para los valientes que aceptan seguir la terapia existe una gran oportunidad de mejor calidad de vida y por consiguiente la felicidad. En la mayoría de los casos, los resultados de la terapia dependen del 50% del sujeto y del 50% del psicólogo, por lo que hay que estar atento en las calificaciones del terapeuta, es importante verificar si está inscrito en el consejo regional de psicología, La psicología es posible encontrar el sitio de los consejos regionales, otro consejo es que la mayoría de los psicólogos no cobran la primera sesión, lo que es una gran oportunidad de conocer al profesional, y recuerde que el psicólogo no da consejos, no habla sobre cuestiones religiosas y esotéricas.

Por fin, quien está buscando alivio para el sufrimiento o en busca de la felicidad puede encontrar en la psicología una gran herramienta para ayudarla, basta querer!