Las normas que definen si un medicamento puede o no ser comercializado varía en cada país, de acuerdo con el órgano responsable, que es quien evalúa y aprueba o no ciertos medicamentos. Por eso hay una variación en los diferentes lugares.
Así, algunos medicamentos que en Brasil son fácilmente encontrados en cualquier farmacia y suelen ser usados por mucha gente, en otros países están prohibidos debido a riesgos que pueden ofrecer a la salud. El médico Lucas Fustinoni, del canal de YouTube Éclaire, ha enumerado algunos y explicó las razones por las que no se venden fuera del país.
Dipirona
Analgésico y antitérmico muy utilizado en casos de dolores, gripes y fiebre, está prohibido en los Estados Unidos y también en algunos países de Europa. El consumo de este tipo de medicamento ofrece riesgo de shock anafiláctico y puede llevar al surgimiento de anemia plástica, que es como si fuera un cáncer que se desarrolla en la médula, incluso de los niños, según un organismo estadounidense responsable del control de medicamentos.
Un remedio bastante común y que incluso es recetado por muchos médicos puede no estar haciendo tan bien a su salud. La indicación es siempre consultar con un médico de su confianza y siempre verificar si realmente hay la necesidad de tomar este medicamento
Diane 35
El anticonceptivo, que es bien conocido y está entre los más tomados por mujeres en Brasil, es un ítem prohibido en Francia. Su fórmula, además de llevar a la contracepción, también contiene sustancias que combaten el acné, reducen la oleosidad de la piel y controlan la oleosidad del cabello. Sin embargo, a pesar de todos estos beneficios, puede engrosar la sangre y causar enfermedades serias como la trombosis.
Una vez más, busque mucho antes de empezar a tomar cualquier tipo de píldora anticonceptiva. Una alternativa interesante es conversar con mujeres que ya hacen el uso del medicamento en cuestión.
Sibutramina
Uno de los remedios más famosos para quien quiere adelgazar, la sibutramina es ingerida para que la persona pierda el apetito y, por supuesto, eso no hace bien a la salud. Ya se han demostrado diversos efectos colaterales, lo que ha hecho que esté prohibido en Estados Unidos y en varios países.
En Brasil, aunque todos estos medicamentos todavía sean vendidos y liberados por la Anvisa (Agencia Nacional de Vigilancia Sanitaria), es necesario tener prescripción médica antes de comenzar a consumir, pues sólo un profesional sabrá indicar la dosis correcta para cada caso sin que haya riesgos la salud. En cualquier caso, si su médico prescribe alguno de estos medicamentos, se recomienda que busque una segunda opinión de otro profesional para consumir medicamentos seguros.