Si usted tiene la costumbre de secar el pelo con secador o utilizar la plancha con frecuencia, usted ya debe saber que estos hábitos pueden acabar dañando los hilos.

Sin embargo, algunas veces no podemos esperar que el cabello se seque naturalmente o no estamos a fin de salir de casa con él en su forma natural.

El problema es que los daños causados ​​por el calor no deben ser ignorados. Cuando los hilos están expuestos a temperaturas elevadas, las cutículas se abren y permiten la salida de la humedad, dejando el pelo poroso y sujeto a frizz.

Para evitar este efecto, una buena idea es utilizar un protector térmico antes de usar el secador, la plancha o el babyliss, con el fin de prevenir los daños causados ​​por el calor de estos aparatos.

Los beneficios del protector térmico

El protector térmico es un producto que promueve la hidratación de los hilos al mismo tiempo que forma una barrera que reduce la pérdida de humedad durante la aplicación del calor.

Las versiones industrializadas de este producto suelen tener una mezcla de dos ingredientes, la ciclometicona y la dimeticona. Mientras que el primero promueve la hidratación del cabello, el segundo es responsable de hacer una capa protectora alrededor de los hilos - por lo que pierden menos humedad durante el uso del calor.

Además, los protectores térmicos suavizan las cutículas, permitiendo que se cierren y dejando los hilos menos porosos. Con ello, se ponen menos sujetos a presentar frizz en ambientes con humedad más alta o en días lluviosos.

Por fin, por aumentar el nivel de hidratación, reducir la pérdida de humedad y promover el cierre de las cutículas, los protectores térmicos dejan el cabello más maleable y con una textura más agradable al tacto.

Cómo utilizar el protector térmico

El protector térmico debe ser utilizado después de que el cabello ya ha sido lavado y acondicionado, con los hilos aún húmedos.

Recuerde utilizar la plancha y el babyliss sólo después de que el cabello esté seco, de lo contrario usted corre el riesgo de "freír" los hilos. Exponer el cabello húmedo al calor de esos aparatos acelera la pérdida de agua, dejándolo resecado.

Si su cabello es fino, es más indicado utilizar temperaturas más bajas, ya que no necesita tanto calor para secar o asumir el nuevo formato. De esta manera, usted ahorra sus hilos de la agresión.

Cómo hacer un protector térmico casero

Si desea probar un protector térmico hecho en casa, usted puede seguir la pista del youtuber Bia Siqueira, del canal Ficando Gata. Anote los ingredientes:

  • 50 gramos de Yamasterol
  • 1 cucharadita de aceite reparador
  • 1 tampón de suero fisiológico
  • 2 tapones de agua (medir con la tapa del suero fisiológico)

Basta mezclar todos los ingredientes y guardar la mezcla en un frasco con rociador, que facilita la aplicación en el cabello.

De acuerdo con youtuber, usted debe aplicar el producto en el cabello húmedo mechado por mecha. No es necesario utilizar una gran cantidad de la mezcla, sino el cabello puede quedar aceitos y pesado.

Si ha quedado alguna duda en relación a la preparación del protector térmico, basta con ver el siguiente vídeo con toda la explicación:

Para quien busca productos totalmente naturales, es posible utilizar algunos aceites vegetales como protector térmico. Los más indicados son el aceite de semilla de uva, coco, aguacate, girasol y el aceite de oliva.

Los aceites de semilla de uva y de girasol tienen un punto de humo bastante elevado, lo que significa que impiden que el calor llegue directamente a los hilos. El aceite de aguacate, a su vez, es capaz de nutrir e hidratar el cabello y de protegerlo contra los daños causados ​​por el sol durante el día.

El aceite de coco puede penetrar profundamente en los hilos, hidratándolos y minimizando la pérdida de agua, además de refrescar el cuero cabelludo en el verano. Por último, el aceite de oliva es rico en vitaminas y antioxidantes, que ayudan a mantener la salud del cabello, y aún es capaz de formar la barrera protectora alrededor de los hilos.

Si todavía tiene preguntas sobre cómo utilizar los protectores térmicos o si su cabello no reacciona muy bien a los productos indicados, siempre es recomendable consultar la opinión de una peluquería de confianza o de una tricologista.