Tal vez usted ha tenido en algún momento de la vida o, por lo menos, conozca a alguien que ya ha tenido conjuntivitis. Se trata de una inflamación de la conjuntiva, una película (membrana) que recubre toda región blanca de los ojos y de la superficie interna de los párpados.
Minoru Fujii, oftalmólogo del Hospital CEMA, explica que el contagio se realiza a través de contacto directo con la persona infectada o con objetos contaminados en ambientes cerrados y con aglomeración de personas. Se sabe cuáles son las características y los síntomas de la conjuntivitis y cómo se puede tratar.
Tipos de conjuntivitis
Rafael Lopes, oftalmólogo de Oftalmed, explica que cualquier inflamación de la conjuntiva significa una conjuntivitis, y las principales causas son: alérgica, inflamatoria, infecciosa por bacterias y virus. • Alérgica:
"es una inflamación por cualquier agente del cual el individuo posea alergia, como polvo, polvo, moho, cigarrillo, animales domésticos, etc.", destaca Lopes. Inflamatoria:
es la inflamación por cualquier sustancia que inflama la conjuntiva, como algún producto químico que entre en contacto con los ojos, según explica Lopes. Infecciosa:
es cuando una bacteria o un virus infecta la conjuntiva. De acuerdo con Lopes, cualquier persona está sujeta a contraer conjuntivitis. "Sin embargo, personas más expuestas al público, que actúan en guarderías o escuelas, profesionales de la salud, usuarios de lente de contacto, inmunodeprimidos son más propensos", explica.
Síntomas: cómo identificarla
Fujii destaca como síntomas de una conjuntivitis:
Ojo rojo;
- Lacrimeje;
- Dolor ocular;
- Visión borrosa;
- Edema palpebral;
- Secreción ocular blanca o amarillenta;
- Fotofobia (intolerancia a la luz).
- Lopes añade además como síntomas: la "sensación de arena en los ojos" y el "ojo pegado" por la mañana. "Dependiendo de la causa, cada síntoma puede estar presente o no, por eso es mejor una evaluación de su médico oftalmólogo", subraya.
Tratamientos
Rafael Lopes explica que el tratamiento inicial es clínico con colirios. "Dependiendo de la causa se pueden utilizar colirios lubricantes, antibióticos, anti-inflamatorios, compresas heladas, etc.", dice.
Minoru Fujii comenta que, en relación a los tratamientos, todo depende de la causa de la conjuntivitis. "La conjuntivitis viral no tiene tratamiento específico, sólo para aliviar los síntomas. La conjuntivitis bacteriana tiene tratamiento con gotas de antibióticos. Y para la conjuntivitis alérgica se hace tratamiento con colirios ", ejemplifica.
Lopes destaca que las conjuntivites pueden llevar a complicaciones corneanas, entre otras. "Por eso, es fundamental buscar un médico oftalmólogo para evaluar y tratar el caso", dice.
Tratamientos caseros para la conjuntivitis
Lopes advierte que los tratamientos caseros no se recomiendan, a no ser con compresas heladas e higiene adecuada. "Lo ideal es buscar un oftalmólogo, definir la causa e iniciar el tratamiento adecuado con los colirios", dice.
Fujii resalta que lo que las personas deben hacer en casa es evitar el contacto con almohadas, sábanas y toallas de personas contaminadas.
En general, como medidas de prevención contra la conjuntivitis, Lopes cita:
Evitar contagio con secreciones oculares de personas ya contaminadas, evitando compartir objetos personales;
- No utilizar la lente de contacto;
- Higienizar constantemente las manos;
- Evitar el contacto con productos que causan alergia;
- Evitar el contacto con productos químicos.
- ¡Con la salud de los ojos no se juega! Por eso es muy peligroso intentar automedicar (por ejemplo, con colirios que ya tiene en casa) y / o apostar en tratamientos caseros. En el caso de cualquier síntoma, el primer paso debe ser buscar un médico oftalmólogo de confianza.
¿Cuál es la diferencia entre la conjuntivitis y el tercio?
Los síntomas son similares (enrojecimiento, dolor, presencia de secreción). Pero las enfermedades son diferentes. Lopes resalta que la conjuntivitis es la inflamación de la conjuntiva; ya el tercio es una alteración en los párpados (calázio y hordéolo) por obstrucción y / o infección de las glándulas lagrimales.
"En el caso del tercio, la principal característica es la presencia de nódulos en los párpados en tres etapas. El ojo del paciente puede presentar pus, además de dolor, irritación y enrojecimiento más leve ", explica el oftalmólogo.
Otra diferencia importante es que la conjuntivitis, cuando es infecciosa, es extremadamente contagiosa. "Entonces los cuidados necesitan ser rigurosos, como evitar contacto directo de los ojos y de las secreciones oculares con objetos, manos y otras personas", dice Lopes. El tercio, a pesar de ser causado por una bacteria, no suele contaminar al prójimo. En cuanto a quienes tienen más posibilidades de desarrollar las enfermedades, Lopes recuerda que niños y personas expuestas al público presentan más probabilidades de contraer conjuntivitis por tener más contacto con otros individuos. "Ya en el caso del terçol, las personas más propensas son aquellas que presentan blefaritis (secreciones que se acumulan en la base de las pestañas), exceso de grasa en la piel, ancianos y niños que presentan dificultad en realizar higiene palpebral", dice el oftalmólogo.
De cualquier forma, a cualquier síntoma en los ojos, la persona debe inmediatamente buscar a su oftalmólogo. Sólo el médico puede diagnosticar el caso y definir el tratamiento adecuado. Si es conjuntivitis, por ejemplo, el profesional orientará, incluso, sobre los cuidados para evitar el contagio de la enfermedad.