El estreñimiento es un síntoma gastrointestinal que ocurre cuando nuestro sistema digestivo no está funcionando correctamente.

Es lo que popularmente llamamos prisión de vientre o intestino preso, cuando alguien tiene sólo entre 2 o 3 evacuaciones por semana. Si es algo que causa dolor, el problema es aún más serio.

Pero hay cosas simples que se pueden hacer en el día a día para evitar que esto suceda y hacer que el intestino vuelva a funcionar normalmente. Un ejemplo es cuidar mejor de la alimentación, optando por ítems que se consideran laxantes naturales.

Ver una lista de alimentos que tienen los mismos efectos que los medicamentos laxantes, no perjudican al organismo y no necesitan prescripción médica para ser consumidos.

1. Agua de coco

Además de ser refrescante, puede reabastecer los minerales del cuerpo. Por eso es una bebida recomendada para las estaciones calientes. Entre sus propiedades están: elimina el exceso de alcohol que se acumula en el cuerpo; aumenta el número de plaquetas y fortalece el sistema inmunológico; limpia el tracto urinario y actúa como un lubricante en el cuerpo; funciona como un laxante que purifica la sangre.

2. Vinagre de manzana

Las manzanas se destacan entre las otras frutas debido a la pectina, sustancia que es responsable de estimular los tejidos en el intestino. Por eso son óptimas para combatir el estreñimiento. El consejo es añadir una cucharada de vinagre de manzana en alguna bebida que te guste. Y también comer manzanas, porque su contenido de fibra hace funcionar el sistema digestivo.

3. Aloe vera

En su estado bruto, el aloe vera (o babosa) puede actuar como un poderoso laxante por contener antraquinona, sustancia que aumenta el contenido líquido en el intestino y quita las partículas que se acumulan en el tracto digestivo. Algunas gotas en el agua u otra bebida son suficientes.

4. Chia y linaza

Las semillas de chia tienen un alto contenido de fibras que es excelente para combatir el estreñimiento. Y las semillas de linaza no sólo proporcionan omega-3, sino que también tienen ácido alfa-linolénico, que ayuda a prevenir enfermedades cardiovasculares y elimina el exceso de grasa. Al consumir estas dos semillas es importante beber mucha agua.

5. Café

El café mejora la digestión y ayuda a combatir el estreñimiento. Cada vez que un alimento es ingerido el organismo libera las hormonas gastrina y colecistoquinina, responsables del movimiento intestinal. Con el café estas hormonas se multiplican, haciendo que las heces puedan salir del cuerpo más rápidamente.

6. Bicarbonato de sodio

Es la sustancia responsable de garantizar que el aire circule rápidamente a través del sistema digestivo. Reduce los cólicos intestinales, los dolores de estómago y neutraliza el ácido, ayudando a soltar las heces y limpiando el colon. La mejor forma de consumir el bicarbonato es añadiendo una cucharada de sopa en un vaso de agua caliente. Mezcle y beba rápidamente, repitiendo el proceso durante las mañanas por 3 días.

7. Ciruelas

Las ciruelas contienen una sustancia llamada pectina, que funciona de forma similar a la fibra, pues limpia el exceso de grasa y colesterol. Comer las leñas secas es un gran truco para combatir el estreñimiento. Sugerencia: deje 3 ciruelas secas sumergidas en un vaso de agua durante toda la noche y beba el agua por la mañana con el estómago vacío. Repita el proceso durante 3 días.

8. Legumbres

Comer vegetales crudos también es recomendable para combatir el estreñimiento, especialmente los vegetales orgánicos, que producen los mejores efectos, ya que son ricos en fibra y aceleran el metabolismo. Algunas de las mejores opciones son: ajo, repollo, cebolla, remolacha, brócoli, espinaca, espárragos, alcachofa, entre otros. La cantidad diaria recomendada es de 5 porciones.

Además de estos alimentos, hay otras actitudes en el día a día que también son beneficiosas para el funcionamiento del organismo, como practicar por lo menos 30 minutos de ejercicio (caminar, correr, bailar) y tomar al menos dos litros de agua diariamente. También es importante nunca forzar o interrumpir la defecación.