Considerada como una especie de ritual en su origen, el masaje hawaiano o Lomi lomi es una práctica milenaria que poco a poco viene popularizándose como una técnica de relajación y una gran aliada en tratamientos terapéuticos.

Con raíces en la Polinesia, más específicamente en Hawai, la técnica tiene movimientos inspirados en el va y viene de las olas del mar. En hawaiano, "lomi" significa frotar, amasar, masajear. La música típica hawaiana también tiene fuerte influencia en los movimientos del masaje, haciendo que sean alternados entre suaves e intensos.

Los movimientos realizados de acuerdo con la melodía de las canciones hawaianas exigen bastante técnica, pues deben mantenerse en una sincronía armoniosa con la banda sonora.

El masaje Lomi lomi es bastante usado para el alivio de dolores, combate al estrés y la depresión. Entre los diversos beneficios del masaje hawaiano, están también el reequilibrio de los sistemas linfático, circulatorio, digestivo y respiratorio, mejora de la textura de la piel y una relajación profunda de los músculos.

Además de hacer bien para el cuerpo, el masaje hawaiano todavía trae beneficios para la cuestión emocional y espiritual de quien la recibe, libera los bloqueos y renueva las energías. El ambiente con velas y pétalos de flores contribuye para que el masaje Lomilomi gane una energía que colabora para el aumento de la autoestima y de la confianza de quien la recibe.

El masaje hawaiano no tiene contraindicaciones, pero así como en otros masajes terapéuticos, para gestantes y personas que sufren de enfermedades crónicas deben recibir orientación médica antes.

El vídeo siguiente trae una demostración de cómo se hace el masaje hawaiano, compruebe: