En todo ambiente de trabajo, hay personas con quienes usted se identifica mejor y conquista una mayor proximidad, como también aquellas con quienes hay mayor distanciamiento. Lo mismo sucede con los jefes. Normalmente, son personas de personalidad fuerte y piezas esenciales para el buen desarrollo de un equipo. Y aprender a convivir con ellos es primordial para alcanzar sus objetos y garantizar el éxito profesional.
El hecho es que si los funcionarios son motivados, consecuentemente hay jefes realizados y un ambiente de trabajo sano y gratificante. Pero para eso, hay que saber lidiar y tener una relación amigable con sus superiores.
Calma y respeto son bases de una buena relación.
"Es necesario que haya respeto en ambas partes. No es porque él es su jefe que usted estará de acuerdo con todo. Si está en desacuerdo con algo, muestre el por qué y ofrezca argumentos a ellos. Los empleados que muestran la iniciativa son muy bienvenidos en cualquier ambiente de trabajo. Pero es importante resaltar que no sirve en nada no concordar con algo y no explicar sus puntos de vista profesionales y de forma respetuosa ", comenta la gerente de recursos humanos, Cristina Souza.
Obtenga las críticas de sus superiores de forma constructiva. Ellos deben ser los profesionales que apuntan los errores y reconocen también los aciertos. "Toda crítica es muy bien venida. Comienza a darse cuenta de que te enseñarán algo en el que tal vez realmente has fallado. Si usted tiene razón, escuche lo que su jefe tiene que decir, pero también coloque sus puntos de vista. Compete a usted ya él ser profesionales y visar lo mejor para la empresa y para una mayor productividad ", dice Cristina.
No dé motivos para que implique con usted. "Normalmente hay mucha queja de los empleados en cuanto al comportamiento del jefe. Pero es necesario que los empleados cumplan correctamente su papel. Llegar en el horario, realizar su trabajo de la mejor manera posible, buscar soluciones a los problemas que surgen. De esta forma, con certeza, el empleador te respetará y verá muy profesionalismo en cada uno ", sugiere la gerente.
Hable sólo cuando sea necesario y no todos los momentos. "Saber hablar cuando es necesario es una gran calidad. Tiene colaboradores que en todas las reuniones muestran sus puntos de vista y no quieren oír los de los demás. "No dar palpites en todo es también una calidad", comenta Cristina.
Cumpla sus plazos correctamente. "La falta de puntualidad también es un factor que deja el ambiente de trabajo desequilibrado. Si usted deja de cumplir el combinado, puede entorpecer el trabajo de los demás y comprometer todo el proyecto ", resalta la gerente.
Huye de los chismes y sea discreto siempre. "Si se involucra en las llamadas" picuinhas "no lleva a nada. A veces, estos chismes son sin base y terminan girando un teléfono inalámbrico. "Sea amigo de todos y no se involucra en esos grupitos", resalta Cristina.
Tenga discreción también en la manera de vestir. Hay profesiones que son más relajadas y que no exigen trajes sociales. Pero hay que tener buen sentido y evitar ropas muy cortas y agarradas. "En ningún caso la mujer debe usar ropa muy pegada, con escotes o de barriga de afuera. La forma en que usted se viste es su tarjeta de visita. La elegancia y el buen gusto son esenciales ", recomienda la gerente.
Exagerar en el perfume también puede molestar a su jefe y sus compañeros de trabajo. "Suavidad y equilibrio son bases esenciales en un ambiente. Nada impide a la mujer pasar su perfume, claro. Pero es necesario que ella sepa la cantidad ideal ", concluye Cristina.
Siguiendo estas recomendaciones, usted estará haciendo su parte en lo que se refiere al ambiente de trabajo armonioso. Es importante resaltar que esto no garantiza que los problemas nunca exista, pero abre puertas para que el camino profesional que usted recorre en la empresa sea más ameno y que "problemitas" no se convierten en "problemas" debido a una mala relación con los superiores.