La oreja de abano es la más frecuente mala formación que acomete las orejas. Se caracteriza por la rotación anterior del pabellón auricular, comúnmente asociada a la no existencia de los pliegues internos de la oreja (anti-hélice).

Por ser girada hacia delante y más plana, la oreja en abismo queda en mayor evidencia, desarmónica con la cara y aparentando ser mayor.

Hay varios grados de abismo, desde el más leve al más severo. Sin embargo, no siempre el grado de la alteración anatómica se correlaciona con el molesto generado por esta malformación. Hay pacientes que con ligero abanico, nunca usan pelo atascado o corto. En los niños es común dejar el pelo encubrir las orejas.

Pero, ¿cuál sería la mejor edad para corregir la oreja de abanico?

Teniendo en cuenta que no se deben operar estructuras todavía en desarrollo y que las orejas se presentan casi completamente desarrolladas en torno a los 5 a 6 años de edad, es a partir de esta edad que la cirugía debe ser realizada.

Creo realmente ser en esta edad la mejor época para operar, pues con la convivencia escolar, es común que el niño sea etiquetado de apodos preconceptos y despectivos. El complejo generado en esta fase, podrá acompañar al paciente durante toda la vida.

Muchos pacientes que operan ya adultos relatan no haber hecho la cirugía antes por falta de oportunidad y, a pesar de que en los días actuales no sufren de prejuicio o son blanco de chistes, no se sienten cómodos y tienen la impresión que siempre están mirando a sus oídos.

Vale resaltar que no hay ningún problema o impedimento de la cirugía ser realizada en cualquier edad después de los 5 a 6 años. En realidad, la mayoría de los que operan no son niños, son pacientes que buscan solucionar una antigua incomodidad generada por las orejas en abanico.

La cirugía se realiza con anestesia local, en adultos y jóvenes. En los niños pequeños la anestesia es general (como toda cirugía infantil). Dura alrededor de 90 minutos. La alta suele ser el mismo día y la recuperación tranquila, poco dolorosa.

Finalizando, creo que es la otoplastia (cirugía plástica de las orejas) una cirugía segura, relativamente simple, con rápida recuperación y que suele traer, además del cambio físico, una gran ganancia emocional y conductual, dejando al paciente libre de complejo para usar el pelo de la manera que quieras.