Es común que durante el embarazo la mujer tenga dudas en cuanto a su alimentación y al peso que debe y puede alcanzar debido a la gestación. Hay tantos mitos en lo que es difícil distinguir lo que es realmente aplicable. Por eso, resolvemos sacar dos de las principales dudas sobre nutrición y el peso ideal en el embarazo , echa un vistazo:¿Cuánto una embarazada debe comer?
Durante el embarazo, el cuerpo de la mujer almacena nutrientes para estar preparado para la lactancia. Siendo así, el organismo pide más calorías para poder nutrir al bebé y mantener reservas para el futuro.
Las mujeres por debajo del peso deben
aumentar su consumo de calorías al comienzo de la gestación para estar listas a tiempo para los últimos meses y para la lactancia. Las mujeres con peso normal o por encima del peso aumentar la ingesta de calorías en la segunda semana .Pero eso no significa que la mujer debe comenzar a "comer por dos" y si se nutre de la manera adecuada. Para ello es necesario que consulte a un nutricionista para hacer una evaluación completa y definir la dieta ideal y el consumo de la cantidad correcta de cada alimento. Normalmente, la
cantidad sugerida para el aumento del consumo de calorías en la gestación queda entre 300 y 350kcal más por día. ¿Cuánto la gestante puede engordar?
Las embarazadas que tienen un peso normal y saludable antes del embarazo deben ganar alrededor de 11 a 14 kg durante el embarazo. Las que están por encima del peso sano deben engordar sólo de 7 a 9 kg mientras que las gestantes que están por debajo del peso tienen que ganar de 13 a 16kg a lo largo de los nueve meses.
Es importante
cuidar la alimentación durante la gestación y no dejarse llevar por el sedentarismo. El exceso de peso durante el embarazo puede conducir a la obesidad. Además, la embarazada por encima del peso corre el riesgo de tener diabetes gestacional, entre otras enfermedades. Estas complicaciones pueden dificultar el parto y la mujer puede tener que optar por una cesárea. En el caso de las gestantes por debajo del peso , existe el riesgo de que el bebé nazca más débil, menos nutrido y más propenso a tener infecciones y otras complicaciones posnatal.En vista de ello, toda gestante debería cuidar de la alimentación y del peso y también contar con el acompañamiento del nutricionista y del médico que está haciendo el prenatal para garantizar un embarazo tranquilo y que el bebé nazca fuerte y sano.