No es difícil encontrar personas que, aun consiguiendo dormir bien todas las noches, están siempre cansadas, con sueño y sin mucha disposición para realizar las tareas de cada día.
Si esto sucede con usted también, no es nuevo el hecho de que ese cansancio excesivo y constante no hace más que obstaculizar su vida y perjudicar su productividad a la hora de trabajar, de estudiar, de cuidar de los hijos e incluso de aprovechar un día soleado al lado de la familia o de los amigos.
Con este problema en mente, no sirve en nada desanimar y dejar que el cansancio tome cuenta y que las cosas continúen como están, con la sensación de que la energía está siempre a punto de llegar a su fin.
Afortunadamente, hay maneras de resolver el problema, y los consejos que daremos a continuación prometen ser la solución que tal vez creyera que no existía.
Todo lo que usted necesita hacer, al final de cuentas, son algunos cambios pequeños y sutiles en su vida, para que tengan como efecto una ganancia extra de energía y disposición. Al adoptar pequeños hábitos, como beber más agua y quedarse más lejos de las redes sociales, usted acaba ayudando a su cuerpo a trabajar mejor y, por consecuencia, ese cansancio excesivo, que más parece un oso sentado en sus hombros, acaba marchándose. En el caso de que se trate de una persona que no sea de su agrado, la persona que se encuentre en el lugar de trabajo. Sin embargo, no es necesario esperar sentir sed para tomar un hermoso vaso de agua, pues aun cuando hay una leve deshidratación, nuestro cuerpo ya se queda con el humor afectado, con dificultades de producir pensamiento crítico y con bajos niveles de energía. Lo ideal es tomar entre dos y tres litros de agua al día, entonces deje su botella de agua siempre llena y cerca. 2. ¿Cómo está su colchón?
Dormir mal está seguro de que el día siguiente no será muy productivo, ¿no es así? Por eso es fundamental cuidar bien el espacio donde usted duerme, para que sea cómodo, y uno de los grandes focos en ese sentido es su colchón, ciertamente.
Las personas adultas deben dormir entre siete y nueve horas por noche, entonces si se despierta con dolores en la espalda o en el cuello, tal vez sea el momento de cambiar su colchón, especialmente si ya tiene signos visibles de desgaste.
3. No deje de tomar el desayuno
En la carrera de todos los días, no es difícil encontrar a personas que prefieren activar la función siesta algunas veces a tener un tiempo en casa para tomar café con calma. Desafortunadamente, esta no es una buena idea - la primera comida de su día es lo que ayuda a su cuerpo a tener energía e incluso tener un buen desempeño cognitivo. Para elegir opciones saludables de esta comida, incluya frutas, cereales integrales y no incluya azúcar.
4. Mueva el cuerpo
¿Sabía que hacer una caminata es mejor que sacar una siesta si la idea es reponer las energías? Un estudio realizado por la Universidad de Georgia reveló que colocar el cuerpo en movimiento mejora no sólo el humor como también la sensación de energía en alta.
Si es posible, haga algunas caminatas cortas en el medio del día, de al menos 20 minutos, o apueste en una buena pedaleada. Las actividades físicas también hacen que su sueño por la noche sea más provechoso.
5. Desconecte
La gente sabe que es bacana conferir sus redes sociales y sus sitios favoritos, pero es necesario que exista equilibrio, justamente para que su cerebro y sus ojos no queden sobrecargados y, por consecuencia, usted se siente cada vez más sin energía.
Deje el teléfono, la tableta y el ordenador de lado un poco, concentrándose en las tareas de su día, en las personas a su alrededor. Puede parecer poco, pero disminuir su ritmo en términos de uso de la tecnología es una forma increíble y eficiente de sentirse menos cansada a lo largo del día. ¡No cuesta intentar!