Mucho se habla sobre las formas que el cambio climático mueve con el planeta y causa serios daños al ambiente - desde eventos climáticos extremos hasta la amenaza de extinción de la vida silvestre en masa.
Pero los cambios climáticos también pueden afectar su salud física y mental - y de maneras sorprendentes. Las consecuencias del efecto invernadero, desastres naturales y un planeta más caliente incluyen desde su estrés hasta la ingesta de medicamentos, el estrés, las infecciones, el sistema inmunológico, o incluso el tratamiento de enfermedades mentales.
Vea siete formas sorprendentes que demuestran cómo el cambio climático está realmente afectando a nuestros cuerpos:
1. Afecta sus alergias
Si usted ha notado que su asma y sus alergias están empeorando en los últimos años, esto puede tener que ver con el clima. De acuerdo con investigaciones de la Organización Mundial de la Salud, altas temperaturas hacen que las enfermedades respiratorias peores, pues aumentan los niveles de contaminantes en el aire. Las temperaturas más calientes y los niveles más altos de CO2 también significan más liberación de polen por las plantas, causando mucho más dolor y aburrimiento para las personas con problemas respiratorios.
2. Aumenta la incidencia de algunas enfermedades
Cuanto más altas las temperaturas, más riesgo hay inundaciones y de propagación de enfermedades transmitidas por el agua. Un estudio de 2013 sobre las inundaciones en toda Europa descubrió que, a medida que las inundaciones aumentaban, aumentaba también la tasa de tres tipos de enfermedades: diarrea, problemas virales o bacterianos transmitidos por roedores e infecciones esparcidas por vectores como mosquitos, garrapatas, moscas y pulgas.
3. Deja más vulnerable al estrés
Vivir en un clima más caliente no es sinónimo de diversión en la playa. Es necesario trabajar y hacer diversas actividades incluso con las temperaturas altísimas, y eso no hace bien. Los estudios de las Naciones Unidas muestran que las olas de calor producen estrés, con picos insostenibles en la temperatura corporal, que hacen las condiciones de trabajo insoportable y aumentan el riesgo de enfermedades cardiovasculares, respiratorias y renales. Hasta 2050, la cantidad de personas que corren el riesgo de estrés por calor aumentará en 350 millones.
4. Afecta la reacción a medicamentos
Un estudio de 2013 ha descubierto que, a medida que las enfermedades producidas por los cambios climáticos surgen, todos se vuelven más propensos a tomar altos niveles de medicación para sentirse sanos. Esto aumenta la dependencia de medicamentos, incluyendo antibióticos y analgésicos, lo que hace que las personas desarrollen resistencia a los que tenemos, y no podemos producir nuevos de forma rápida para combatir las enfermedades.
5. Es malo para la salud mental
El aumento de temperatura es difícil para quienes tienen problemas de salud mental. Las investigaciones muestran que los extremos en la temperatura, especialmente el calor, están ligados a resultados malos para aquellos que sufren de problemas de salud mental, aumentando la incidencia de enfermedades y muerte, comportamientos agresivos, violencia y suicidio. En las olas de calor, las personas que ya han sido diagnosticadas con una enfermedad mental enfrentan mayores riesgos de mortalidad, por razones que no son completamente claras, pero pueden tener que ver con la forma en que el calor afecta el bienestar. 6. Puede cambiar el ciclo menstrual
El ciclo menstrual puede verse afectado por muchas influencias externas. Si las mujeres están expuestas al aire contaminado cuando los adolescentes, aumenta el riesgo de tener un ciclo irregular en la vida adulta. Esto es porque los contaminantes del aire afectan los niveles hormonales y el metabolismo humano.
7. Aumenta la probabilidad de nacimiento prematuro
Para las mujeres embarazadas los extremos del cambio climático, de picos de calor a nevadas intensas, pueden ser preocupantes. Varios estudios han descubierto que la exposición a temperaturas extremas al inicio de las gestaciones, especialmente durante las primeras siete semanas, puede aumentar significativamente la tasa de partos prematuros.
Las crisis de salud debido al cambio climático ya han comenzado a afectar a algunas poblaciones más vulnerables, ya que el hambre, la sequía, la contaminación y otras cuestiones graves son frecuentes en países con menos infraestructura. Nuevas investigaciones se están realizando constantemente para explorar los vínculos entre estos cambios y algunas enfermedades, así como posibles formas de evitar todo esto.