Usted tenía un gran sueño en su mente y empezó a ponerlo en práctica. Pero, conforme el tiempo pasó, usted percibió que no sería tan fácil alcanzarlo, pues los obstáculos del día a día le hacen dudar de sí misma.
O, entonces, puede ser difícil admitir, pero parece que aquel sueño de años atrás ya no tiene más sentido en su vida actual. ¿Será que es hora de desistir y buscar un nuevo objetivo?
Para ayudarle a reflexionar sobre este tema, consulte 7 preguntas que usted puede hacer a sí mismo antes de concluir que la mejor idea es abandonar su sueño.
1. ¿Por qué tienes ese sueño?
Trate de recordar los motivos que le llevaron a perseguir su sueño: realización personal, éxito financiero, reconocimiento, voluntad de hacer la diferencia en el mundo? Independiente de cuáles son las razones, es común que se queden un poco olvidadas cuando ponemos el sueño en práctica, pues pasamos a preocuparnos por las cuestiones del día a día.
Antes de desistir, reflexione sobre sus motivaciones iniciales e intente imaginar cómo usted se sentiría si logra alcanzar sus objetivos y deshacerse de todos los obstáculos que hacen que sus metas parecieran más distantes.
2. ¿El exceso de información está sobrecargando usted?
Cursos en línea, cursos presenciales, ebooks, blogs, artículos de expertos ... Todo el mundo parece tener mucha información para transmitir a usted - y usted se queda con la impresión de que necesita acompañar todo para realizar su sueño.
En algunos casos, cuanto más respuestas usted busque, más dudas usted tendrá. Tal vez, sea mejor ahorrar tiempo y energía y enfocarse en un plano menos amplio, con una carga menor de información. 3. ¿Tu objetivo es realmente inteligente?
Para que un objetivo pueda ser alcanzado, él necesita seguir algunos principios y ser inteligente. En inglés, "inteligente" por ser traducido como "smart", y cada letra de esa palabra trae una característica necesaria para que su objetivo sea factible:
S de Specific
- (específico): un objetivo claro y específico hace que los esfuerzos sean enfocados en la misma dirección; M de medición
- (mensurable): es necesario tener valores o referencias para saber cuánto de su objetivo ha sido cumplido; A de Attainable
- (alcanzable): un objetivo muy lejano e inalcanzable le dejará agotado y sin la menor voluntad de esforzarse. Por eso, es mejor dividirlo en objetivos menores; R de Relevant
- (relevante): su sueño va a suplir sus necesidades? ¿Está de acuerdo con los otros objetivos a largo plazo que usted tiene? T de Time-Bound
- (limitado por el tiempo): un objetivo necesita tener un plazo, si no él nunca tendrá un fin y usted no sabrá si fue alcanzado. 4. ¿Tienes miedo del éxito?
Parece contradictorio, pero el éxito y sus consecuentes responsabilidades pueden ser espeluznantes para algunas personas. Si ese es tu caso, pregúntate por qué tienes miedo de evolucionar.
Conforme las responsabilidades aumenten, usted aprender a lidiar con ellas o se dará cuenta de que es hora de aumentar el número de personas involucradas en su proyecto. Confía en tu capacidad.
5. ¿Tu vida mejorará si te desiste de tu sueño?
Imagínese que usted desistió de perseguir su sueño. No es necesario invertir tiempo y energía en él. ¿Cómo te sentirías? ¿Te quedas aliviada o sentiría un gran vacío?
Si la respuesta es un gran vacío, entonces no es el momento de desistir. Si, por otro lado, te harías más feliz, tal vez ese sueño no sea adecuado para el momento actual de tu vida. Usted puede tratar de adaptarlo o considerar seguir otro camino.
6. ¿Cuánto has invertido en tu sueño?
Haga una estimación de cuánto usted ha invertido para realizar su sueño. No estamos hablando de recursos financieros, sino también de tiempo, energía y sacrificios que usted tuvo que hacer.
Si su confianza está disminuyendo, recuerde todo lo que usted ha invertido y haga una lista de los progresos que usted obtuvo en ese tiempo. ¿Su esfuerzo está siendo recompensado? 7. ¿Qué dirías a otra persona en tu situación?
Si tu mejor amiga estuviera en tu situación, ¿dirías a ella para desistir o continuar? Nuestra tendencia es ser mucho más comprensivos con las otras personas, reservándonos a nosotros mismos sólo críticas y reproches.