Aunque tiene un papel importante en la preparación de la mayoría de los platos, ya se sabe que la sal, cuando se consume en exceso, trae serios daños a la salud. Está asociado a la hipertensión arterial, a las enfermedades cardiovasculares y renales ya la hinchazón de una forma general. En este sentido, el llamado "sal de hierbas" surge como una alternativa benéfica a la salud y ha conquistado cada vez más adeptos.

No se trata de una receta única, sino de la técnica de mezclar un poco de sal con hierbas, sustituyendo entonces el consumo de sal puro por esta mezcla más sana a la hora de condimentar los más variados alimentos.

Para la profesora Paula Daiany Gonçalves Macedo, especialista en Nutrición Clínica de la Facultad Santa Marcelina (FASM), la sal de hierbas es una salida en la reducción de la sal en la preparación de los alimentos, manteniendo el sabor en las preparaciones. "Se trata de una mezcla simple que acumula los efectos benéficos de las plantas, que pueden variar de acuerdo con la preferencia de cada persona", dice.

3 beneficios esenciales de la sal de hierbas para la salud

La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda el consumo de sólo 5 g de cloruro de sodio (sal de cocina) al día. "Sin embargo, el brasileño, debido al consumo exagerado de alimentos procesados ​​y ultraprocesados, consume, en promedio, más del doble de lo permitido, aproximadamente 12 g", destaca Paula.

En este contexto, es más fácil entender cuáles son los principales beneficios del consumo de sal de hierbas, según la especialista:

  1. Menos sodio: el uso de la sal de las hierbas lleva a la reducción del consumo de cloruro de sodio (sal de cocina que, a su vez, está asociado a enfermedades ya la hinchazón. Esta es, además, su mayor indicación.
  2. Más sabor a los platos: La sal de hierbas potencializa el sabor natural de los alimentos y permite además innumerables combinaciones de hierbas, dando un toque especial a los más variados platos.
  3. Más salud: la sal de hierbas también proporciona beneficios provenientes de los ingredientes utilizados en la mezcla, pudiendo, por ejemplo, contar con propiedades antioxidantes y calmantes.

4 hierbas poderosas para añadir en la sal

Paula cita abajo ejemplos de hierbas que se pueden colocar en la sal de hierbas y sus respectivos beneficios:

  1. Romero: hierba antioxidante y cicatrizante. Rica en vitaminas del complejo B, vitamina A y C, hierro, calcio, entre otros.
  2. Albahaca: anti-inflamatorio y calmante. Rico en vitamina K, calcio, magnesio y hierro.
  3. Orégano: antifungicida y anti-inflamatorio, antibactericida. Rico en vitamina A, C, K y complejo B, además de calcio, hierro y potasio.
  4. Salsina: anti-inflamatoria, digestiva, diurética. "A pesar de los beneficios presentados, se recomienda el uso de esas hierbas también durante la preparación de los alimentos, y no únicamente acopladas a la sal", destaca la especialista.

Recetas saludables de sal de hierbas

A la hora de preparar la sal de hierbas, lo que cuenta son las preferencias de cada persona. A continuación, Paula cita dos ejemplos de preparación:

Sal gruesa con romero

Ingredientes

1 taza de sal gruesa

  • 1 taza de orégano
  • 1 taza de té de romero
  • 1 taza de estragón
  • Modo de preparación:

lave bien las hierbas y séquelas con un paño limpio. Después, colócalas junto con la sal en la licuadora o en el procesador de alimentos y triture todo. Guarde la mezcla en un recipiente cerrado, en un lugar fresco y seco. Sal marina con hierbas variadas

Ingredientes

10 g de romero

  • 25 g de albahaca
  • 15 g de orégano
  • 10 g de perejil
  • 100 g de sal marina
  • Modo de preparación:

bata los ingredientes en la licuadora. Guarde en una olla de cristal bien cerrada. Utilice en lugar de la sal común. En el caso de las hierbas aromáticas, de preparación sin secretos, sólo necesitará sal gruesa, romero, tomillo, albahaca, orégano y nuez moscada. Si lo prefiere, da para hacer esta receta con sal fina, sal marina o sal light.

2. Sal de hierbas con cebolla: una manera de dar más sabor a los alimentos al mismo tiempo que se reduce el consumo de sal. Usted sólo necesitará sal marina, albahaca, orégano, romero, tomillo y cebolla deshidratada.

3. Sal de hierbas frescas: práctico y sano ... En cerca de 15 minutos su sal de hierbas estará listo! Se puede colocar en un bote de cristal bien cerrado y conservado en la nevera por hasta tres semanas.

4. Sal de hierbas con nuez moscada: de preparación bien simple, esta sal de hierbas se convierte en óptima opción para sazonar ensaladas, verduras y asados. Pruebe a hacer, por ejemplo, un filete de pollo con un poco de limón y más esta sal. Otra sugerencia es utilizarlo junto al aceite para templar hojas!

5. Sal de hierbas con bajo contenido de sodio: para hacer esta mezcla, busque una sal de buena calidad y con menor índice de sodio, como la sal marina o la sal rosa. Además de él, usted usará romero deshidratado, albahaca deshidratado, orégano deshidratado y perejil deshidratado.

6. Sal de hierbas con limón: puedes usar esta receta para condimentar lo que quieras, como aves, pescados y mariscos, verduras, ensaladas, sándwiches, etc. Puede ser utilizado como condimento antes de cocinar o puede servir también como sal de mesa y para finalizar alguna preparación.

7. Sal de hierbas con ajo y salsa: receta que rinde bien, es óptima opción para condimentar carnes (blancas o rojas), para asados ​​o barbacoa. Usted sólo necesitará sal gruesa, condimentos y hierbas de su preferencia.

8. Sal de hierbas con patata: receta óptima para condimentar varios tipos de carne (pollo, buey, pescado) y hasta mariscos. También puede dar un toque especial en el arroz, en las verduras, en el huevo frito o omelete.

9. Sal de hierbas con toque de aceite: ideal para sazonar carnes en la barbacoa, disminuyendo así el consumo de sal gruesa. Para hacer, sólo necesitará sal gruesa, perejil, cebolla, orégano, albahaca y aceite de oliva.

10. Sal de hierbas con raspas de limón: con pocos ingredientes, esta sal proporciona beneficios increíbles para la salud, a través del uso de la albahaca, que contiene vitaminas y minerales como el calcio, fósforo y hierro, del orégano, que está repleto de minerales esenciales para el organismo, y de raspas de limón, que posee de 5 a 10 veces más nutrientes que el jugo del limón.

11. Sal de hierbas con sésamo: la base de esta receta es el sésamo blanco, que es rico en calcio. Además de él, usted usará, básicamente, romero, orégano, hoja de laurel y un poco de sal. Pero también puede estar a gusto para añadir otras hierbas que les guste!

Contraindicaciones y alertas sobre el consumo

A pesar de tener sus beneficios, la sal de las hierbas no debe ser consumida en exceso. "Se recomienda consumir una cantidad moderada para condimentar los alimentos, no sobrepasando también 5 g diarias, aunque la sal esté mezclada con las hierbas", orienta Paula.

De acuerdo con la especialista, al igual que la sal tradicional, la sal de hierbas debe tener restricción para individuos hipertensos, que posean enfermedades cardiovasculares y pacientes renales.

Quiere dar más sabor a sus platos y, de quiebra, disminuir el consumo de sodio ?! Apueste en la sal de las hierbas, utilizando los ingredientes que más le gustan y pudiendo siempre variar la receta (para no marear)!