Los mitos y tabúes en relación al absorbente interno son muchos. Por no saber cómo usar, por miedo a perder la virginidad, de sentir dolor, de no poder quitar el producto del cuerpo, de vazas, el hecho es que muchas mujeres acaban dejando de usar una opción más discreta e higiénica para la protección durante el período menstrual por las dudas y preocupaciones en relación sobre el asunto.
Una de las principales ventajas del absorbente interno es ser más discreto que el convencional y deja a la mujer más a gusto. Además, puede ser un gran aliado en situaciones en las que el absorbente común podría ser una molestia, como en la playa y en la piscina.
Los ginecólogos aseguran que es totalmente seguro y cómodo, pero hay que tener algunos cuidados básicos. Aprenda cuáles son ellos y aclarar de una vez por todas las dudas sobre el absorbente interno.
El absorbente interno está hecho de algodón y se puede encontrar en diferentes tamaños, cada uno de ellos está indicado para un tipo de flujo. En general el producto no ofrece riesgos para la salud de la mujer, pero los cuidados con la higiene deben ser redoblados. Lo ideal es cambiarlo en un período máximo de cuatro horas. Si el flujo es intenso, es necesario cambiar antes, ya que si el absorbente interno permanece en la vagina más tiempo que lo permitido, puede causar infecciones.
Es normal tener dificultad para colocarlo en las primeras veces, pero el consejo es estar bien relajado y tranquilo. No tenga miedo y empuje bien en el fondo, en la profundidad de su dedo. En la duda, utilice un absorbente con aplicador y siga las instrucciones que vienen en el embalaje del producto.
No es necesario tener miedo de que el absorbente interno se pierda dentro de usted. El absorbente interno se queda en la vagina, que es un tubo de 8 a 13 centímetros de profundidad. Hay una abertura entre su vagina y el útero, situada en el cuello del útero, pero es demasiado pequeña para que un absorbente interno pase por ella. Además, hay una cuerda para facilitar a la hora de sacar el absorbente, es sólo tirar con cuidado el hilo que queda del lado de fuera de la vagina. Si pierde la cuerda, debe retirar el absorbente interno de la vagina usando el dedo.
Nadie pierde la virginidad usando un absorbente interno. El himen es una membrana elástica que resiste bien a la colocación de absorbentes internos. Sin embargo, para sentirse más seguro, consulte a su ginecólogo antes de usar el absorbente interno. Después es sólo llevar la vida con bastante tranquilidad, aun estando "en aquellos días".