Usted era la princesa absoluta de la casa, todos los juguetes eran suyos y sus padres estaban siempre disponibles para usted - hasta que llegó un pequeño ser minúsculo que sólo lloraba y causó un giro en su vida.
La llegada de una hermana o hermano menor representa un gran impacto para cualquier hijo mayor, y ese cambio puede ser difícil cuando usted no entiende muy bien por qué usted fue "dejado de lado" de repente. Sin embargo, sepa que el hecho de haber pasado por eso trae varios beneficios para su vida adulta, como estos 10 listados a continuación:
1. Usted es más asertivo
Por ser el primer niño de la casa, usted necesitó aprender a hacer algo que sus hermanos más jóvenes nunca necesitaron: enfrentarse a sus padres sola. Ya sea porque usted no quería comer la ensalada o tuvo que hacer un acuerdo para ganar un juguete, usted necesitó manifestar sus voluntades y "luchar" contra el poder de sus padres.
Todo esto sirvió como entrenamiento para que usted se convirtiera en una persona más asertiva y aprendiera cómo negociar con quién representa una autoridad, como profesores o jefes.
2. Usted tiende a ser más madura
En general, los padres alentan que el hijo mayor se vuelva más independiente y maduro, de modo que puedan tener un poco más de tiempo y energía para satisfacer las necesidades del más joven. Así que si usted es la hermana mayor, es posible que haya madurado más temprano, sobre todo si usted ha ayudado a cuidar de sus hermanos de alguna manera. 3. Usted se siente responsable de sus padres. Los hermanos mayores tienden a presentar un sentido de responsabilidad mayor, son más empáticos y logran percibir con más facilidad cuando los padres están pasando por alguna dificultad.
El resultado de esto es que el hijo o la hija mayor suele ser más presente en la vida de los padres después de adultos, pues siente que es responsable de ayudarlos en esta nueva etapa.
4. Usted se siente responsable de todo el mundo, en realidad
El sentido de responsabilidad y empatía que usted desarrolló en relación a sus padres suele ser extendido también a los amigos cercanos, de modo que ellos saben que pueden contar con usted. Al final, forma parte de la personalidad de los hermanos mayores querer "arreglar" las cosas a su alrededor.
5. Usted sabe compartir
Por ser la hermana mayor, usted pasó un buen tiempo siendo el único foco del amor y la atención de sus padres - hasta que llegó un nuevo bebé y usted necesitó aprender a dividir los juguetes, el cuidado y incluso el tiempo de aquellos que antes parecían existir solamente para usted.
Esto puede haber sido sufrido en aquella época, pero te enseñó a compartir y manejar el hecho de que no todos tus deseos serán atendidos cuando quieras. De la misma forma, usted también aprendió a ser más versátil, pues usted ya pasó por un excelente "entrenamiento" de adaptación a una nueva situación familiar.
6. Usted es un poco más "cáscara gruesa"
No queremos decir que usted es grosero, pero sí que el hecho de ser la hermana mayor probablemente le hizo ser más resistente. Al final, por ser la primera hija, acabó siendo un "laboratorio" para que sus padres aprendieran a cuidar de un niño - y es natural que ellos hayan cometido errores en ese proceso. Pero no los culpe: usted sobrevivió y se hizo más fuerte.
7. Usted tiene su lado emocional más bien desarrollado
Aunque la dinámica familiar cambia con la llegada del segundo bebé, el hijo mayor sigue siendo el único que recibió atención de los padres a tiempo completo - y no es como si esa atención cesara totalmente después de que llegue un hermanito, ¿verdad?
Por eso, si usted tuvo la oportunidad de crecer en una casa armoniosa, ese tiempo "extra" que usted tuvo con sus padres se refleja en beneficios emocionales y sociales que usted lleva hasta hoy. En consecuencia, eres más autoconfiante y tiende a buscar relaciones más maduras.
8. Usted tiene expectativas más altas para sí misma
Si usted tiene una lista de objetivos que desea alcanzar, sepa que esto puede estar relacionado con el hecho de ser la hermana mayor.
Esto sucede porque usted convivió directamente con los adultos, sin tener el modelo intermedio de un hermano que, a pesar de más viejo, todavía era un niño. De esta forma, al compararse con los adultos, usted desde temprano esperaba más de usted misma.
9. Usted tiene una habilidad mayor para resolver problemas
Cuando usted es la hermana mayor, es natural que todos a su alrededor esperan que usted sepa más que sus hermanos, y eso explica por qué usted creció teniendo una buena capacidad de resolver problemas.
Además, el hijo mayor suele desarrollar más habilidades de gestión, pues desde temprano aprende la necesidad de dividir el tiempo, los juguetes y las tareas.
10. Usted es más independiente
No siempre había un niño cerca para jugar con usted, entonces usted aprendió a jugar sola - e incluso después del nacimiento de su hermano menor, no tenía la menor gracia jugar con un bebé que sólo lloraba . Por eso, usted se ha convertido en una persona más independiente y capaz de suplir sus propias necesidades. De esa forma, usted no siente tanta necesidad de tener un socio o pareja, pues desde pequeña usted se acostumbró a "volverse" sola.