Querer hacer la diferencia en la vida de las personas es una voluntad muy común. Muchas veces creemos que para eso son necesarios grandes actos que demandan mucho esfuerzo y tiempo, entonces acabamos siempre dejando para después. Pero, ¿qué actos grandiosos son necesarios para hacer la diferencia?
Hechos grandiosos son sí válidos, pero existe una serie de pequeñas acciones posibles de ser hechas diariamente, que no demandan esfuerzo, tiempo y que se pueden hacer ahora mismo.
Ser la diferencia para las personas a su alrededor puede ser más simple de lo que usted se imagina, además de ser muy placentero. A continuación se muestra una lista con 9 actitudes sencillas para empezar hoy mismo a hacer la diferencia en la vida de las personas a su alrededor:
1. Elogiar siempre que sea posible
Elogiar es un acto simple que puede hacer que el día de una persona se convierta en mucho mejor. Al final, ¿a quién no le gusta recibir un elogio? En el trabajo, cuando te guste el resultado de algo que tu colega hizo, jamás pierda la oportunidad de elogiar. Elogios animan a las personas a continuar haciendo sus trabajos con cariño y dedicación.
Elogie más a sus amigos, familiares ya todas las personas que te rodean. Con certeza con este acto, además de ganar muchas sonrisas como retribución, usted estará seguro de haber hecho el día de una persona ser mucho más feliz.
2. Mostrar empatía en lugar de simpatía
La empatía es cuando usted entiende lo que la persona está sintiendo, puede ponerse en la situación de la persona y entiende la situación que está pasando. La empatía es libre de juicios. La simpatía se relaciona con el carisma.
Demostrar empatía con alguien hace que esta persona no se siente sola en momentos malos. Demostrar que usted entiende la situación, apoya y principalmente que no juzga, alienta y hace toda la diferencia en cualquier situación que la persona esté experimentando. El video abajo muestra cómo la empatía puede hacer la diferencia en la vida de las personas, echa un vistazo a:
3. Siempre usar las palabras "gracias" y "por favor"
Muchas veces nos olvidamos de usar esas palabritas mágicas con las personas que más convivimos. Con la convivencia, decir por favor, gracias y disculparse, puede parecer innecesario con las personas más íntimas, pero no lo es.
Por lo tanto, si necesita algo se acuerda de terminar la frase con por favor. Cuando reciba algo, agradezca. Si comete algún error siempre recuerde pedir disculpas. No importa cuanta proximidad exista con la persona en cuestión, algunos hábitos que suenan formales como usar esas expresiones, hacen toda la diferencia y jamás deben desaparecer de su vocabulario.
4. Demostrar gratitud
Tener gratitud va mucho más allá de decir gracias. La gratitud se demuestra más allá de las palabras e implica actos como tratar de hacer lo mejor por la persona a quien usted está agradecido. Tantas veces recibimos cosas maravillosas de las personas de nuestras convivencias, pero dejamos para después el acto de demostrar la gratitud.
Nuevamente, no son necesarios actos grandiosos para hacer la diferencia en ese aspecto. Trate con cariño y dedicación a las personas a las que estás agradecido. Si es posible, haga lo mismo para esas personas. Asegúrese siempre, de alguna manera, que usted tiene gratitud por quien está a su alrededor.
5. Estar disponible cuando necesiten su ayuda
Si alguien pide su ayuda y está a su alcance, no dude en ofrecer apoyo prontamente. Estar disponible significa demostrar a la persona que le ayudará con todo lo que pueda hacer. Muchas veces, apenas decir que usted está disponible ya hace toda la diferencia.
Es importante no dejar para después una petición de ayuda y hacer lo posible ahora mismo. Demostrar disponibilidad y prontitud muestra cariño y preocupación por la causa de la persona.
6. Ser oyente
Si una persona está desahogando para usted, hable lo menos posible. Muchas veces nos gusta hablar y hablar de nosotros mismos y desaprendemos a escuchar lo que la otra persona tiene que decirnos. Ofrezca su hombro amigo a las personas importantes de su vida, deje que ellas hablen lo que están sintiendo y oigan con atención.
Ser oyente requiere entrenamiento y paciencia, por lo tanto, comience a entrenar aún hoy. Cuando alguien esté hablando algo para usted, no interrumpa el habla y oiga tranquilamente. Hable sólo cuando esté seguro de que el habla de la persona ya ha terminado.
7. Esparcir sonrisas
Haga que las personas a su alrededor se ríen y sonríen. Evite decir cosas negativas y concentrarse en esparcir palabras que traigan sonrisas. No comience un asunto malo si es innecesario y no ayuda a difundir malas noticias, porque nadie necesita eso. Cuente más historias y noticias sobre cosas positivas, ayude a sembrar el bien.
Sonreír, por sí solo, ya es una gran manera de sembrar el bien. Sonríe a las personas de su convivencia siempre que sea posible. La sonrisa es el lenguaje universal y siempre será retribuido.
8. Hacer algo bueno para un completo extraño
Inicie una corriente del bien, realice un acto de bondad por quien usted no conoce y deje un boleto diciendo para ese desconocido hacer algo por otro desconocido. Así, haciendo la diferencia en el día de una persona usted alcanza la diferencia en el día de varias personas.
Haga que el planeta sea un lugar mejor y lleno de actos de bondad. Por ejemplo, si usted vio un coche con las ventanas abiertas estacionado en la calle, cierre las ventanas y deje un billete anónimo diciendo a la persona retribuir haciendo un favor para un completo desconocido.
9. No ayudar a esparcir el odio
Con certeza todo el mundo ya ha sido víctima del odio gratuito. En el tránsito, en el trabajo, en la universidad y en todos los lugares que frecuentamos. En esas situaciones es muy común que aparezca la voluntad de querer responder de la misma forma, pero pare y piense: ¿en qué va a cambiar? Quien te trata con odio puede apenas estar teniendo un mal día, así que respire e ignore o responda el acto educadamente.
Si alguien ha hecho algo mal en el tráfico no responda haciendo algo malo también, ignore y deje a la persona irse. Si alguien ha sido grosero en las palabras con usted en el trabajo, no inicie una discusión innecesaria, responda educadamente. Recuerde: gentileza genera gentileza.
Practicando, usted verá cuánto es simple y placentero hacer la diferencia para alguien diariamente. Pequeños actos, si se hacen con cariño, pueden dejar el día de las personas más felices y gratificantes. En la lista hay algunas sugerencias, pero usted puede hacer una infinidad de acciones y tratar de alcanzar el máximo de personas posible.
¿Qué tal empezar ahora mismo a hacer la diferencia en el día de alguien?