Alimentarse correctamente en la correría del día a día no es tarea fácil, pero, con un poco de organización y dedicación, es posible realizar esta proeza. No siempre conseguimos saborear una comida preparada a la hora, por lo que la opción de congelar alimentos es una buena pedida.

Además, el desperdicio se hace presente como un efecto negativo de esta falta de tiempo, donde, muchas veces, el alimento llega a estropear en la nevera por no haber tiempo hábil para su preparación.

Según la nutricionista Michele Silva, responsable técnica en el servicio de nutrición del Promueve São Camilo, congelar alimentos es la práctica ideal para facilitar la vida de quien está siempre en la carrera. "Al realizar este proceso, es posible facilitar las actividades fundamentales para el bienestar y la salud, además de reducir el desperdicio de lo que no es consumido por falta de tiempo para preparación", explica.

En relación al proceso de congelar y descongelar alimentos, la profesional todavía revela que, dependiendo de la forma en que utilizamos los alimentos antes de la preparación o en la preparación de verduras y verduras, puede haber una pérdida significativa de nutrientes.

Para evitar que esto ocurra, es necesario seguir algunas técnicas para preservar los nutrientes a la hora de la preparación y en el tiempo para el consumo, como preparar los alimentos a la parrilla, asados, cocidos al vapor, por inmersión, el corte y la forma de congelación y descongelación. "Son cuidados necesarios para garantizar un buen aprovechamiento de los alimentos", añade.

Cómo congelar los alimentos correctamente

Compruebe a continuación algunos consejos de la profesional para congelar los alimentos sin perder sus nutrientes:

1. Primero por la calidad y la limpieza de sus alimentos

Siempre que sea posible, elija alimentos de buena calidad, de preferencia orgánicos y realice una buena limpieza de los mismos antes de llevarlos al congelador.

2. Intente poner los alimentos

"Procure separar los alimentos en pequeñas porciones", enseña Michele. Lo ideal es que, después de descongelado, no vuelva al congelador. Por eso, las porciones deben corresponder a la necesidad exacta de aquella comida.

3. Utilice los envases adecuados

El profesional indica colocar el alimento en envases adecuados, como potes de plástico, vidrio o bolsas de plástico para alimentos congelados. Las mejores opciones serían potes con tapa hermética y bolsas con cierre al vacío.

4. Identifique con una etiqueta

Incluso en el congelador, el alimento continúa teniendo una fecha de caducidad y puede almacenarse en este lugar durante un máximo de tres meses. Por lo tanto, es recomendable identificar cada envase con una etiqueta que contenga la fecha de fabricación y la fecha de caducidad.

5. Mantenga los alimentos enfriados

Posee un congelador bien regulado a temperatura constante es esencial para que los alimentos puedan conservarse sin cambios en su sabor. Según la profesional, la temperatura ideal debe estar por debajo de 18 ° C.

6. Haga el blanqueamiento de los vegetales antes de congelarlos

En el caso de los vegetales, buscando no haber pérdida de sus propiedades nutricionales, Michele recomienda blanquearlos antes de ser llevados al congelador. Para ello, basta sumergir unos 300gr de vegetales en 2,5 litros de agua hirviendo. Dejarlos sumergidos de 1 a 10 minutos, de acuerdo con el grado de dureza del alimento. Después, es necesario enfriarlos en un recipiente con hielo, para sólo entonces secárselos y embalarlos.

Después de su preparación, o incluso limpieza, poner los alimentos lo antes y llevarlos al congelador. Cuanto más tiempo expuesto al aire los alimentos quedan, mayores son las posibilidades de contaminación por microorganismos, pudiendo estropear más rápidamente.

¿Y para descongelar?

Saber efectuar correctamente la descongelación de los alimentos es un proceso tan importante como su congelación, evitando así el desperdicio, la contaminación o la pérdida del alimento. Compruebe a continuación las instrucciones de la profesional:

1. Descongelar en el refrigerador

Lo ideal es retirar el alimento del congelador, colocarlo dentro de un recipiente y llevarlo a la heladera por cerca de 12 a 24 horas. "De esta forma, la descongelación se realiza de manera segura, sin grandes riesgos de contaminación", enseña la profesional.

2. Utilice el microondas para acelerar el proceso

Si desea acelerar el proceso de congelación, Michele orienta colocar el alimento en una bolsa de plástico bien cerrada y sumergirse en agua caliente. Otra posibilidad sería utilizar el horno microondas.

3. Evite utilizar agua corriente para descongelarlos

Al realizar este hecho, junto con el hielo, los alimentos congelados perderán sus nutrientes e incluso su sabor.

4. Pule el proceso de descongelación

Según la profesional, hay algunos alimentos como carnes, salchichas, hamburguesas, sopas y caldos, que pueden saltar el proceso de descongelación e ir del congelador directamente a la olla, sin cambios en sus nutrientes.

5. No congele un alimento ya descongelado

"Una vez descongelado, el alimento no puede volver al congelador, excepto en el caso de un producto crudo que se convierta en receta", alerta la profesional. De ahí la importancia en poner los alimentos de acuerdo con lo que será consumido.

Alimentos que no deben ser congelados

Aunque gran parte de los alimentos pueden ser congelados, hay algunos alimentos que poseen su congelación no recomendable, ya sea por pérdida de sus propiedades originales o nutrientes. En algunos de ellos citados por la profesional:

  • Patatas:si las patatas están cocidas, éstas absorben mucha agua, además de oscurecerse y ablandarse.
  • Cremas y Pudines:si la receta ligera almidón de maíz en su preparación, este ingrediente soltará el agua del plato después de congelado.
  • Hojas Verdes:cuando están crudas, éstas pierden agua y la congelación puede ocasionar en la quema de sus hojas.
  • Frutas:pera, mango y plátano son frutas que tienen su coloración alterada a bajas temperaturas.
  • Yogur: el yogurt no debe congelarse, ya que los ingredientes que lo componen tienden a separarse y el producto acaba presentando una apariencia tallada.Mayonesa:
  • la grasa se separa de los demás ingredientes y el alimento talla cuando se descongeló.Huevo crudo entero:
  • no se puede congelar, ya que su corteza puede estallar.Verduras y hortalizas:
  • tomate crudo, pepino y rábano quedan con el color y el sabor alterados, además de su textura quedar ablandada.En el caso de alimentos congelados, Michele indica que estos deben ser ligeramente templados y cocidos por el tiempo mínimo necesario, ya que la congelación tiende a acentuar los condimentos y ablandar los alimentos.

Ideal para aquellos que no renuncian a una buena comida, pero no disponen de tiempo hábil para prepararlos momentos antes de la comida, congelar y descongelar alimentos es una práctica fácil y segura, siempre que sea con cuidado. ¡Evite el desperdicio y adquiera ya este hábito!