¡Mueve!

Según expertos, el sedentarismo es una de las mayores causas de problemas en las rodillas. Se queda mucho tiempo sentado lleva al debilitamiento de la musculatura, la cual debe ser fortalecida para sostener la mayor articulación del cuerpo. Por eso, invierta en la práctica de actividades físicas.

Por otro lado, ejercicios mal hechos pueden causar problemas y agravar las lesiones ya existentes, agachamientos realizados de manera incorrecta y ejercicios que utilizan mucha carga pueden ser perjudiciales.

Luego, lo mejor que se debe hacer es buscar la orientación de un profesional, generalmente un educador físico o fisioterapeuta, el cual le instruirá sobre la mejor manera para ejecutar el ejercicio.

Además, practicar ejercicios es importante, pues ayuda a mantener el cuerpo en forma, evitando el sobrepeso, otro factor que contribuye a dolores y lesiones en las rodillas. En el caso de los ancianos, es importante practicar ejercicios para entrenar el equilibrio y que utilicen poca o casi ninguna carga, ya que los más viejos son más susceptibles a la artritis, enfermedad que lleva a la destrucción de las articulaciones.

Elija el calzado adecuado

En el caso de las mujeres, el uso constante de tacón alto puede ser perjudicial a las rodillas, ya que el tacón demasiado alto altera el centro de gravedad del cuerpo y obliga a la mujer a colocar la rodilla hacia adentro, puede comprometer y causar problemas en la articulación.

Por otro lado, calzados rectos demasiado, como zapatillas y sandalias rastreras, también pueden causar lesiones, pues reciben todo el impacto del suelo y, por lo tanto, predisponen el cartílago, la cual, según expertos, se trata de la estructura más perfecta de absorción de impacto que existe, al desgaste.

Por lo tanto, el zapato ideal es aquel que posee un pequeño salto o salto del tipo anabela. Otra opción, la más adecuada según los profesionales del área, es el tenis, ya que ese tipo de calzado amortigua y estabiliza los movimientos.

Mujeres, atención! De acuerdo con expertos, el cuidado con las rodillas debe ser redoblado para las mujeres, pues, con el paso de los años, tienden a perder fibra muscular, lo que acarrea pérdida de fuerza en los músculos, y masa ósea. Estas pérdidas se producen con personas de ambos sexos, pero son más intensas en el caso de las mujeres. Por eso, el cuidado con las rodillas debe ser constante.

Es importante recordar que la práctica de ejercicios físicos y el uso de calzados adecuados ayudan a prevenir problemas, pero al sentir dolores o cualquier tipo de incomodidad en la mayor articulación del cuerpo, un especialista debe ser buscado, para que el tratamiento adecuado sea desarrollado. El diagnóstico de lesiones, generalmente, es hecho por el historial del paciente y por exámenes físicos y otros tipos de pruebas. La rehabilitación puede envolver bolas, aparatos de gimnasia y otras actividades.