El embarazo es un período mágico en la vida de las mujeres, que esperan con gran expectativa el nacimiento de un nuevo miembro para la familia. Pero es también una fase que exige cuidados especiales por parte de la futura mamá, acompañamiento médico, etc.
No son pocos los relatos de mujeres embarazadas que sufren con algunas molestias en esa fase. Entre ellos, los dolores en la espalda. En el caso de las mujeres, se observó que la mayoría de las personas que sufren de la enfermedad de Chagas y de la enfermedad de Chagas, el embarazo. De acuerdo con el médico, investigaciones apuntan que cerca del 80% de las gestantes presentarán, en algún momento, este tipo de dolor.
¿Qué causa este dolor?
Piero Scarparo destaca que factores biomecánicos, como el cambio de las curvas normales de la columna (cifosis, lordosis e inclinación pélvica) que ocurren para la acomodación del feto, además de las alteraciones hormonales que promueven la acumulación de líquido y el "aflojamiento" de las estructuras ligamentosas de la región lumbar y pélvica, se describen como mecanismos involucrados en la aparición de la lumbago gestacional. "Se sabe que, en el tercer trimestre gestacional, la aparición de la lumbalgia es más frecuente", explica el ortopedista.
Scarparo añade que algunos estudios apuntan que las mujeres que eran sedentarias antes de la gestación y aquellas que durante la gestación realizan un esfuerzo físico exagerado, con movimiento repetitivo, presentan un riesgo mayor para la aparición de la lumbalgia.
Cuidados necesarios para evitar dolores de espalda en la gestación
Durante el embarazo, es fundamental evitar levantar peso. Pero si la gestante tiene que cargar algo, ella debe sostener el objeto cerca del cuerpo, doblar las rodillas - y no la espalda - y tratar de no torcer el cuerpo.
- Si la gestante pasa mucho tiempo sentada - debido al trabajo, por ejemplo -, ella debe mantener la columna bien recta. Es importante aún levantar de vez en cuando y hacer una rápida caminata, en el propio lugar, sólo para cambiar un poco de posición.
- La mujer embarazada no debe todavía usar tacón alto y, sí, optar por zapatos bien cómodos y firmes.
- Las mujeres que trabajan de pie, deben organizarse para hacer un descanso de descanso a mediodía. Además de estos consejos, es fundamental conversar con su médico sobre todos sus hábitos (no sólo los de trabajo), para que pueda pasar las mejores orientaciones para ese período que requiere cuidados especiales.
- Prevención: ¿cómo evitar los dolores de espalda durante el embarazo?
De acuerdo con el ortopedista Scarparo, la recomendación preventiva es para que las mujeres que planean quedarse embarazadas hagan ejercicios moderados, con foco en el fortalecimiento de la musculatura lumbar y pélvica. "Para eso, es muy importante el acompañamiento de un profesional del área", recuerda el médico.
Para las mujeres que ya están embarazadas, la recomendación es la realización de actividades físicas leves a moderadas, como, por ejemplo, caminatas y ejercicios en el agua, entre otros. "Es importante subrayar que las gestantes siempre deben buscar orientaciones con su médico antes de iniciar la práctica de actividad física, siendo sedentaria o no", destaca Scarparo. En los dos últimos meses de embarazo, sin embargo, en los dos últimos meses de embarazo, sintió ningún dolor en la espalda. "Durante los primeros ocho meses, conseguí trabajar normalmente, sentada frente al ordenador. Mi médico me aconsejó que me levantara de una en una hora y caminaba en la oficina para evitar mayores molestias. Pero en los últimos meses de gestación, sufrí un poco con dolores en la espalda ", relata. "Busqué a mi médico y él me pasó buenas orientaciones, hablando como yo debería sentarme correctamente, acostarse, etc. Y recordó que no debería quedarse mucho tiempo en la misma posición ", añade.
Tatiane Bhoscariol, de 29 años, abogada, cuenta que no sintió dolores en la espalda durante el embarazo. "Tuve una gestación óptima, sin molestias. Creo que ha sido así porque yo ya practicaba actividades físicas desde antes de quedar embarazada. Después, continué con caminatas, prácticamente diarias, lo que ayudó mucho. Me sentía muy bien ", relata.
Ahora ya sabes: si estás pensando en quedar embarazada, una buena sugerencia es ya invertir en ejercicios con foco en el fortalecimiento de la musculatura lumbar y pélvica, contando siempre con la supervisión de un profesional del área. Para ello, consulte con anterioridad a un médico de su confianza y siga todas las orientaciones pasadas por él.