La miel es tan sabrosa, que además de poder ser consumida pura, también sirve como ingrediente especial en diversas recetas de culinaria. Además, es un excelente edulcorante natural y es uno de los mejores y más eficaces remedios naturales contra los efectos de la gripe y resfriados, asma, amigdalitis, bronquitis, problemas de circulación, músculos y aún prepara el cuerpo para defenderse de las infecciones.

Los beneficios de la miel no terminan por ahí. También fortalece el sistema nervioso, ayuda a desintoxicar, facilita la digestión, es un excelente antiséptico y antibiótico. En forma de té, puro, añadido en el jugo o en las recetas, quien consume la miel sólo tiene que ganar.

Echa un vistazo a algunas> mezclas con miel que ayudan a combatir algunos males para la salud y tener buenos motivos para incluir el alimento en tu menú.

Miel con propóle

La doble miel con propóleos es infalible. Esta mezcla tiene propiedades bactericidas con el efecto antibiótico del propóle, eficaz para quienes tienen problemas en las vías respiratorias. Si prefiere añadir eucalipto, la mezcla da aún más efecto, pues el ingrediente también ayuda a combatir la gripe, pues cuida de los bronquios.

Miel con eucalipto:

Tiene función expectorante y acción antibactericida de las vías aéreas. La mezcla de miel con eucalipto es eficaz para aliviar los síntomas de tos y bronquitis.

Miel con guaco y propóleo

La miel con guaco facilita la eliminación de la secreción con la tos y es un buen broncodilatador, antiasmático y expectorante.

Miel con propóleos y limón-clavo

La mezcla de miel con propóleos y limón-clavija se indica principalmente para casos de gripes y resfriados muy fuertes, pues es rica en vitamina C. Lo ideal es consumir en forma de té caliente para aliviar la presión sensación de malestar del cuerpo. Quien tiene asma, amigdalitis o bronquitis debe cambiar el limón-clavo por loto, un gran dilatador de los bronquios y expectorante.

Miel con propóleos y berros

La mezcla de estos tres ingredientes es un gran descongestionante, anti-inflamatorio y diurético. La miel con propóleos y berros tiene la función de limpiar la sangre, mejorando las articulaciones.