No importa si ocurra al principio, medio o fin del embarazo, tampoco si la mujer es madre de primera, segunda o múltiples viajes: cualquier pequeño sangrado que aparezca en las bragas de la gestante es capaz de hacerla perder el sueño. Y en este caso, una cierta dosis de preocupación es incluso bienvenida!
Ciertamente, no todo sangrado es motivo de desesperación. En algunas situaciones, la sangre es hasta normal y no representa riesgo para la gestación. Pero es fundamental que el caso sea investigado.
En el momento de la gestación, el sangrado en esta fase de la gestación puede representar una amenaza para la salud de las personas, de aborto o sangrados del cuello uterino. En los dos casos, es fundamental buscar orientación médica lo más rápido posible.
Segundo y tercer trimestres
De acuerdo con el ginecólogo y obstetra Janifer Trizi, en el segundo y tercer trimestres pueden ocurrir desprendimiento de placenta, siendo éste un cuadro más grave.
"La presencia de placenta previa - anormalidad en la implantación de la placenta -, también puede presentar sangramientos durante toda gestación", añade la médica. Es un caso que puede traer complicaciones para el embarazo, por lo que debe ser diagnosticado cuanto antes. En esta situación, generalmente el sangrado es abundante, de color rojo vivo y no viene necesariamente acompañado de cólicos.
Al final del embarazo, puede ocurrir el desprendimiento prematuro de la placenta, que tiene como síntomas, además del tono de sangre roja viva o oscura, cólicos fuertes y contracciones persistentes. La situación es grave y debe tratarse con urgencia. "Independientemente del tipo de sangrado, es fundamental que la paciente busque el hospital para ser examinada y realizar USG, siendo posible un diagnóstico certero, pudiendo salvar madre y feto", destaca la ginecologista y obstetra Janifer Trizi.
Es muy importante también que la futura madre no se desespere en estas situaciones de sangrado y mucho menos tome algún remedio sin orientación médica.
Relaciones sexuales
Son comunes relatos de gestantes que tuvieron algún sangrado después de la relación sexual. "En este caso hay que parar el acto a la hora y buscar el hospital más cercano", destaca la ginecóloga y obstetra Janifer Trizi. Es importante aún evitar una nueva relación sexual hasta conocer la causa del sangrado y escuchar las orientaciones del médico.
Relatos de madres
Altina Rivoli, 34 años, ama de casa, cuenta que, alrededor del cuarto mes de gestación, tuvo un sangrado que la asustó bastante. "No sentía dolores, pero encontré el sangrado extraño y fui al pronto socorro para cerciorarse de que estaba todo bien. Acabo de pasar toda la noche internada, pues estaba presentando una infección urinaria. Fue un tremendo susto, pues llegué a pensar que podría estar con desprendimiento de placenta. El médico, entonces, me recetó un remedio específico y bastante agua para hidratar. Gracias a Dios quedó todo bien ", relata.
Denise Ferreira, 31 años, profesora, cuenta que en la 11ª semana de gestación, tuvo un sangrado después de la relación sexual. "Busqué a mi ginecólogo lo más rápido posible, pero él constató que estaba todo bien conmigo y con el bebé. Después de eso tuve otras veces relaciones sexual sin problemas ", dice.
Consulta médica
En la consulta con el ginecólogo, después del sangrado, es fundamental que usted explique a él, con detalles, todo lo que ocurrió, para que él pueda hacer el diagnóstico del caso.
Las características del sangrado pueden indicar sus causas: cuál fue la duración del sangrado? ¿Fue un sangrado leve o pesado? ¿Fue acompañado por dolores? Estas y otras cuestiones son muy importantes.
Es importante destacar que, como el sangrado en el embarazo puede ocurrir por diferentes motivos -que puede o no ser algo grave-, no es posible hablar de un solo tratamiento. "Hay varios diagnósticos, por lo tanto, para cada caso será indicado un tratamiento específico o pasada las orientaciones correctas", dice la ginecóloga y obstetra Janifer Trizi.
Medidas preventivas
Aunque los sangrados pueden ocurrir por diferentes motivos en el embarazo y, en algunos casos, son inevitables, algunos cuidados pueden ayudar a evitar un aborto espontáneo u otros problemas durante la gestación:
No fume ni use drogas de ningún tipo, incluido el alcohol;
Mantenga una alimentación balanceada;
Haga comprobaciones médicas regulares;
- Siga todas las instrucciones de su médico desde el inicio del embarazo;
- No dude en buscar ayuda médica en caso de duda.
- Siguiendo estos sencillos consejos, el embarazo probablemente será tranquilo, sin ofrecer riesgos a la madre o al bebé.