¿Alguna vez se detuvo para pensar que ver la vida de forma optimista favorece la felicidad? Muchas personas pierden mucho tiempo de sus vidas lamentando y hablando de su infelicidad, dificultades, deseos no realizados, no consiguiendo enfocarse en un objetivo que puede cambiar esa situación. Se acaban alejando a personas de cerca de sí, en función del hecho de que sólo vean los hechos malos, desvalorizando las buenas situaciones que puedan ser favorecidas. Cuando estamos viendo sólo situaciones malas, normalmente no vemos que tenemos algunas salidas posibles, y acabamos enterrados en la propia infelicidad. Todos tenemos problemas para resolver, pero algunas personas presentan un grado de

optimismo que ayudan a vivir las situaciones más levemente, consiguiendo separar los momentos malos de otros aspectos y su vida, otras no, ven sólo el lado malo de las situaciones, no consiguiendo aprender y resignificar los hechos negativos. Nuestro pensamiento es tan rápido, que ni nos damos cuenta de cuánto pueden ser nocivos, pero cuando son

pesimistas, no nos sirven, por eso tenemos que hacer un ejercicio diario para que podamos desarrollar pensamientos saludables. Conforme practicamos, nos damos cuenta que estamos acostumbrados a pensar cosas malas, y dejamos eso ser nuestro guía de vida, pero al comenzar a prestar la atención, vamos percibiendo que podemos cambiar el curso de los pensamientos, empezando a pensar solamente situaciones agradables. De esta forma comenzar a experimentar emociones que traen felicidad, contentamiento, y confianza. Los pensamientos ocurren en cadenas, formando una red, cambiando la forma de sentir y ver el mundo a nuestro alrededor. Si es mal, vemos todo ir mal, si pensamos de forma optimista, vemos mayores posibilidades de concretar nuestros deseos.

Todo este proceso viabiliza transformar su vida, pues con pensamientos sanos, podrá generar comportamientos de éxito, pues el optimismo, la alegría frente a las vivencias de la vida, pueden ser una excelente ayuda en el desencadenamiento de situaciones que llevan a la calidad de vida.