¿Ha pasado más tiempo en la casa de su novio que en la suya? ¿Tienen suficiente intimidad para hablar sobre todo? Prácticamente todos los días de la semana se van a acostar juntos y no ve más sentido en dormir separados?

Si las respuestas a todas las preguntas anteriores son "sí", tal vez usted ya ha parado para preguntarse si no es el momento de ustedes "juntar sus cosas definitivamente" y pasar a vivir juntos en el mismo hogar!

Actualmente, no son pocas las parejas de novios que toman esta decisión de vivir juntos antes o incluso sin realizar una ceremonia de boda tradicional.

Célia Lima psicoterapeuta, experto personal, destaca que el matrimonio en sí - el acto de firmar papeles y hacer una ceremonia (tanto se hace religiosa o no) - es sólo la coronación de lo que ya se ha establecido. "Vivir juntos ya es el propio matrimonio: todo ya está siendo compartido, empezando por el espacio, pasando por la división de tareas y terminando con los gastos", comenta.

Lo que pasa es que muchas parejas se sienten más seguros emocionalmente si no llaman el "vivir juntos" de "matrimonio", según discurre la psicoterapeuta Célia. "Si la experiencia no es buena ellos pueden separarse sin cargar el peso de una separación formal", explica. Por otro lado, continúa Célia, muchos llaman esa convivencia de "prueba". "Piensan" vamos a ver si funciona ". De esa forma, si perciben que vivir junto es una situación placentera, ellos formalizan la unión ", explica la profesional.

¿Cuál es la hora correcta para vivir juntos?

Claro que es prácticamente imposible responder a esta pregunta ya que cada pareja tiene sus particularidades. Pero, de forma general, Célia Lima cree que a partir del momento en que las "casas se mezclan", hombre y mujer, tal vez, puedan comenzar a conversar acerca de vivir juntos.

"Es decir, cuando ambos pasan más tiempo en la casa uno del otro que en la propia casa; cuando no ven sentido en dormir solos; cuando se toman planeando la compra de un mueble que acomode las cosas de ambos; planeando un viaje para dentro de meses; cuando perciben que juntos van a ahorrar más que viviendo en casas separadas ... tal vez sea ese el momento de conversar acerca de vivir juntos ", ejemplifica la psicoterapeuta.

¿Es incorrecto vivir junto antes de la boda?

Esta es una duda común entre muchas parejas ya que el matrimonio, independientemente de la religión, es un acto bastante tradicional. Sin embargo, sin tener en cuenta la cuestión religiosa -que, por supuesto, siempre debe ser respetada y acordada entre la pareja-, nada es "equivocado" cuando ambas partes están de acuerdo.

"Podemos entender 'vivir juntos' como un 'pre-matrimonio'. Pero, de hecho, pasar por esa fase no es garantía de que la relación será duradera después del matrimonio formal. Se trata de un período en que es posible establecer la diferencia entre formar una asociación afectiva real y "jugar a la casita", comenta la psicoterapeuta Célia. "Si la pareja es lo suficientemente madura para enfrentar el desafío de construir una relación, el matrimonio será sólo una consecuencia natural. Pero si es sólo una experimentación vacía, un juego, los problemas y desentendimientos infantiles van a aparecer en poco tiempo ", destaca la profesional.

El lado financiero de vivir junto

Talita Aguado, 29 años, pedagoga, cuenta que ella y su novio decidieron ir a vivir juntos también por una cuestión de reducción de gastos. "Nosotros dos ya morábamos solos, en la misma ciudad. Estábamos siempre juntos, en un apartamento o en el otro. Entonces llegamos a la conclusión de que lo más sensato era morar, definitivamente, juntos ", dice.

Hoy, Talita cuenta que dividen todos los gastos. "Hacemos incluso una hoja de cálculo en Excel. "Hacemos una previsión de los gastos antes de iniciar el mes, y ya depositamos en el ahorro lo que queda", explica. En la opinión de Talita, esa es una buena sugerencia para las parejas que pretenden vivir juntos.

Fernanda Prado, de 27 años, periodista, cuenta que, mientras vivía con sus padres, no tenía tanta noción de cuán importante era controlar bien sus gastos. "Hoy, viviendo con mi novio, aprendí lo que es ahorrar ... No me quedo gastando con cualquier tontería, después de todo, tenemos que comprar comida para casa, cuenta de agua y luz para pagar, etc.", comenta.

Fernanda relata que ella y su novio también dividen todos los gastos. "Si, por un motivo u otro, estamos un poco más 'apretados' en ese mes, tratamos de ahorrar. Dejamos de salir por uno o dos finales de semana y ahí las cosas entran en el eje de nuevo. "Creo que el secreto es tener un buen diálogo con el compañero, ahí todo tiende a salir bien", dice.

¿Qué tomar en consideración a la hora de decidir vivir juntos?

Célia Lima destaca que el amor es sólo una parte del conjunto de cosas a considerar en la hora que la pareja decide vivir junto. "Es necesario ser bastante realista con respecto a la organización de la casa, división de tareas, división de gastos. Hablar mucho acerca de lo que la pareja entiende por compartir la vida es fundamental para evitar frustraciones innecesarias ", comenta.

"¿Quién le gusta más cocinar? ¿Quién se despierta temprano para preparar el café? ¿Es cada uno por ti? ¿Vamos o no tener un animal doméstico? En el caso de que la pareja se aprende "con la convivencia", destaca la psicoterapeuta Célia.

Es un hecho que muchas cosas cambian en la vida de la mujer y del hombre desde el momento en que deciden vivir juntos. "Si esa pareja aún vivía con los padres antes de tomar esa decisión, ellos van a tener que aprender a administrar el hogar. "Hacer compras, cocinar, lavar las propias ropas, pagar las cuentas de la casa, dividir los gastos, son algunas situaciones nuevas con las que se van a encontrar", recuerda Célia Lima. "Si uno de ellos o ambos ya viven solos y por lo tanto ya saben lo que significan esas responsabilidades, ellos tendrán que prepararse para hacer concesiones, para ajustar su modo de vivir al modo de vivir del compañero", destaca la profesional.

Implicaciones legales de vivir junto

El abogado Marcelo Souza explica que actualmente dos personas que viven juntas pueden configurar una unión estable. "Y el Código Civil reza que tal comportamiento configura el régimen de comunión parcial de bienes. Por lo tanto, si está debidamente comprobado, todo lo que la pareja adquirió mientras residían juntos tendrá que ser compartido medio a medio ", destaca.

6 consejos importantes para seguir al vivir junto con su pareja

1. Atenderse a la cuestión financiera

Célia Lima destaca que toda unión necesita acuerdos, es como un contrato. "Por lo tanto, es muy práctico y necesario que una de las primeras cuestiones a ser tomadas en consideración sea la situación financiera de la pareja", dice.

"Ambos son profesionalmente estables? Si no es así, es importante tener una reserva que garantice el pago de alquiler y de todos los gastos de la casa por algunos meses - tres o cuatro, por ejemplo. Los problemas de orden financiero son un estopí que puede detonar una crisis en una pareja aún en formación ", destaca la psicoterapeuta.

2. Establece reglas de convivencia

Célia Lima destaca que intentar establecer reglas de convivencia es bastante saludable, pues todo lo que es conversado antes evita desentendimientos. "Pero, más importante que eso: hay que haber predisposición para cumplir los acuerdos -que van desde colgar la toalla mojada hasta el relevo de los quehaceres domésticos. "Esto pasa también por hacer acuerdos con relación a invitar a amigos a frecuentar la casa, por el respeto a la individualidad uno del otro y por las visitas a los familiares", explica la psicoterapeuta Celia.

3. Están siempre abiertos al diálogo

Sí, es muy interesante establecer reglas de convivencia, pero, por supuesto, eso no significa que los acuerdos no puedan ir cambiando según las necesidades surgen. Exactamente por eso, en cualquier relación, el diálogo es fundamental, como destaca Célia Lima.

4. Organizen sus cosas y donen / vendan lo que tengan la mayoría de las casas (departamentos) diferentes, es probable que tengan ahora en el nuevo hogar cosas repetidas.

Usted no necesitará, por ejemplo, dos camas. (Pero si tienen un cuarto de huéspedes para poner una de ellas, bueno!) Tal vez no necesiten dos grandes almacenes ... Probablemente no necesitará dos heladeras, dos cocinas, ni siquiera dos ralladores de queso, dos cojuntos completos de cuchillos ...

En fin, es tiempo de sentarse y conversar sobre lo que va o no quedarse en la nueva casa! Los objetos / muebles / elementos repetidos se pueden vender o donar.

5. Hagan cosas juntos

Dividir las tareas del día a día es fundamental, pero es importante, también, que el hombre y la mujer no se olviden de reseñar un rato para hacer algo juntos, dentro de casa. ¿Qué tal preparar un almuerzo o una cena juntos, por ejemplo? 6. No olviden el romanticismo. Dejando de lado todas las reglas de convivencia, es fundamental que el hombre y la mujer nunca se olviden de los buenos motivos que, probablemente, los llevaron a vivir juntos. Al final, el amor y el cariño por el compañero no pueden ser olvidados!

¿Qué tal preparar una cena romántica para recibir su amor en casa después del trabajo? ¿O simplemente comprar un vino para que tomen juntos y relajarse el viernes por la noche? ¡Actitudes simples como éstas pueden hacer la diferencia y fortalecer aún más la unión!