El alisamiento fotónico es más una novedad entre los diversos tipos de cepillo progresivo ofrecidos por los salones para quien quiere conquistar el cabello liso de los sueños.
También conocido como photon hair, este tipo de alisamiento utiliza menos química que los demás y además de transformar los hilos, también tiene alto poder de hidratación.
El secreto está en un aparato de luz fotónica, que potencia la absorción del producto y por eso, dispensa una química muy fuerte. Al ser aplicada, la luz provoca una reacción en los hilos que transforma cabellos rizados, ondulados y con volumen en cabellos extra lisos.
Una ventaja del alisamiento fotónico es que puede ser hecho en cabellos descoloridos, con tintura, hilos que ya pasaron por procesos químicos, incluso con productos a base de tiogricolato de amoníaco.
Además, la cliente puede lavar, prender o colorear los cabellos en el mismo día en que haga el alisamiento. El procedimiento del fotón de pelo sólo está contraindicado para el cabello que han sufrido procesos químicos que poseen metales pesados en la formulación, como alisamiento y relajación.
Al contrario de la progresiva tradicional, que va saliendo con los lavados y dura cerca de dos meses, el resultado del fotón de pelo puede durar de seis meses hasta un año, dependiendo del crecimiento de la raíz.
Vea a continuación un vídeo que muestra paso a paso cómo se hace el alisamiento fotónico.