El estómago alto es un trastorno generalmente causado por la distensión abdominal, que hace que esta parte del vientre quede con un volumen mayor. Además de la cuestión estética, esta es también una cuestión de salud.
El problema puede tener diferentes causas, tanto relacionadas con el aumento de peso, en cuanto a la genética, ya que una persona magra también puede tener estómago alto.
La nutricionista Haline Dalsgaard, idealizadora del proyecto online "Salud en el plato", y la cosmetóloga Lia Mezzomo, del salón Jacques Janine Rio Sul, en Río de Janeiro, explican que lo más importante es conocer bien el funcionamiento de cada organismo y, así, , identificar lo que puede estar sucediendo.
A continuación, explican algunas situaciones comunes para quienes tienen este problema, hablan de los alimentos más y menos indicados, además de consejos para ayudar a evitar o reducir el estómago alto.
¿Cuáles son las posibles causas?
La mala digestión o la formación de gases, causados por la forma en que comemos, pueden influir en el surgimiento del estómago alto. Ver algunas causas más comunes:
- Consumo excesivo de alimentos, lo que sobrecarga y lentifica la digestión.
- Intolerancia a algún tipo de alimento, que puede causar fermentación y producción de gases.
- Problemas gastrointestinales como flatulencia excesiva, hinchazón abdominal, diarrea, estreñimiento o síndrome del intestino irritable.
- Situaciones que llevan a la acumulación de grasa en la región abdominal.
- Cuestiones genéticas, independientemente del tipo físico o de la alimentación.
Para cada caso, la forma de manejar el problema debe ser diferente. Usted debe consultar a un nutricionista o gastroenterólogo para ayudarle a identificar lo que necesita ser hecho.
¿Cómo tratar?
Con respecto al tratamiento del estómago alto, la alimentación es el principal punto, ya que la forma en que comemos y los alimentos consumidos, hacen la diferencia por agravar o atenuar el problema. Las actividades físicas y otros tratamientos también pueden ayudar. De acuerdo con la nutricionista Haline, la primera medida es reducir la cantidad de alimentos en las comidas y aumentar el número de comidas al día. "En lugar de simplemente tomar el desayuno, almorzar y cenar, es más interesante reducir la cantidad de comida en el plato y 'romper' el descanso de la mañana y de la tarde con pequeños bocadillos", explica.
Comer de la manera correcta
La forma de comer también puede influenciar la producción de gases, debido a la deglución de aire o mala digestión, que provocan flatulencias. "Comer demasiado rápido o hablar mientras se alimenta puede ser un gran enemigo de la digestión", alerta la nutricionista.
Evitar los alimentos que hacen mal
Haline también lista algunos alimentos que se deben consumir con moderación, como: azúcares, miel, jarabe de maíz; harinas refinadas (por no tener fibras); leches y derivados, cuando la lactosa causa fermentación e incomodidad; edulcorantes como xilitol, manitol y sorbitol, muy utilizados en balas y chicles dietéticos; como verduras como col, repollo, coliflor y achicoria, legumbres como remolacha y zanahoria, frutas como sandía, caqui y mango, y granos como frijoles y guisantes.
Ejercicios físicos
Otra sugerencia importante es apostar en ejercicios localizados, pues ellos ayudan a fortalecer la musculatura y eso dará sustento a los órganos en la cavidad abdominal.
Tratamientos estéticos
La cosmetóloga Lia Mezzomo dice que el tratamiento estético más indicado para el estómago alto es la criolipólisis. "Procedimiento en el que las células de grasa se congelan hasta que se destruyan", explica.
Es importante dejar claro que los trastornos de digestión son muy individuales y lo que vale para una persona puede no ser bueno para otra. Lo importante es saber identificar qué tipo de alimento puede estar dificultando la digestión y qué medidas funcionan mejor en cada caso.
Consejos y hábitos simples para aliviar el estómago alto
Además de los tratamientos, algunas medidas pueden ayudarte a aliviar las sensaciones de estómago alto. En el caso de los frijoles y guisantes, coloque los granos de agua en el agua durante unos 30 minutos, luego deseche el agua y utilice otro para cocinarlos. Este procedimiento ayuda a reducir la producción de gases generados por estos alimentos.
Aumente la ingesta de agua durante todo el día. El agua es fundamental para ayudar a la acción de las fibras de los alimentos en la mejora de la digestión, además de evitar el estreñimiento.
Reducir el consumo de bebidas alcohólicas, pues el alcohol aumenta la permeabilidad intestinal y colabora para la producción de gases.
- Apueste en alimentos ricos en fibra, que aumentan la saciedad, y en tés digestivos, como té verde, menta, menta, hibisco, psilium, hierba cidera, boldo y cáscara sagrada, que son diuréticos y pueden facilitar la quema de calorías, además de combatir la hinchazón.
- Comience el día con un jugo verde digestivo. La punta de la nutricionista Haline Dalsgaard es batir en la licuadora 1 rebanada de piña, 6 hojas de menta, ralladuras de jengibre, 200ml de agua de coco y hielo.
- Incluso siguiendo todas las orientaciones correctamente, los profesionales afirman que, al igual que cualquier otro problema estético, el estómago alto puede desaparecer y volver, dependiendo de la dieta y el estilo de vida de la persona.