El aceite de girasol, extraído de las semillas de esta flor, es ampliamente utilizado en la cocina y también en fórmulas cosméticas debido a sus propiedades.

Por ser rico en grasas saludables, vitamina E, C, B1, B5 y B6 y minerales como cobre, fósforo, zinc y magnesio, se considera uno de los aceites más sanos disponibles.

Además de prevenir enfermedades serias como algunos tipos de cáncer, el aceite de girasol ofrece beneficios para la piel y el cabello, principalmente en relación a la hidratación.

Compruebe la lista de efectos positivos que este aceite lleno de propiedades poderosas puede ofrecer para la piel, el pelo y la salud:

Beneficios del aceite de girasol para la piel

El aceite de girasol es excelente para mantener la salud y la belleza de la piel piel a causa de sus propiedades calmantes y emolientes. Además, por ser rico en nutrientes y antioxidantes, es ampliamente utilizado en tratamientos contra el acné, irritaciones, eczema y otros problemas de la piel.

  • Agente de hidratación: debido a sus propiedades emolientes, el aceite de girasol ayuda a la piel a conservar su hidratación. Se puede utilizar como una barrera protectora contra el resecamiento;
  • Mejora de la salud de la piel: el aceite de girasol es muy rico en vitamina E, que ayuda a prevenir los daños causados ​​por la radiación UVA. Además, esta vitamina protege la piel contra las arrugas;
  • Tratamiento del acné: por ser muy ligero y no graso, este aceite es fácilmente absorbido por la piel, sin obstruir los poros. Sus vitaminas y ácidos grasos actúan como antioxidantes para regenerar las células y ayudan a combatir la bacteria causante del acné;
  • Protección contra la radiación solar: además de la vitamina E, el aceite de girasol es rico en betacaroteno, que deja la piel menos sensible a los daños causados ​​por el sol;
  • Prevención del envejecimiento precoz: las propiedades antioxidantes ayudan a combatir los radicales libres que causan el surgimiento de arrugas y líneas de expresión en pieles jóvenes;
  • Tratamiento de la piel seca: con un gran poder emoliente, el aceite de girasol aumenta la capacidad de retención de agua por la piel, siendo beneficioso para personas con piel seca o sensible;
  • Tratamiento de otros problemas de piel: por ser un aceite de alta calidad y presentar textura ligera, es adecuado para pieles normales y secas. Se utiliza en productos tópicos y confiere una sensación de tacto suave.

Beneficios del aceite de girasol para el cabello

Así como en la piel, el aceite de girasol ejerce un efecto de hidratación en los cabellos. Los nutrientes y los antioxidantes de este ingrediente también proporcionan beneficios para los hilos.

  • Control del frizz: debido a su textura, el aceite de semilla de girasol ayuda a controlar el frizz, combate la deshidratación y puede ser usado como un acondicionador natural. Aplíquelos en los hilos antes de lavar los cabellos dos veces por semana para obtener estos efectos;
  • Tratamiento de algunos problemas capilares: por ser extremadamente ligero, este aceite ayuda a condicionar el pelo graso. Además, él nutre el cabello y previene la rotura de los hilos;
  • Prevención del afinamiento y de la caída: por ser rico en ácido alfalinolénico, el aceite ayuda a prevenir que el cabello se quede fino. También es eficaz en el tratamiento de la caída del cabello;

Beneficios del aceite de girasol para la salud

Además de ofrecer ventajas para la piel y el cabello, los componentes del aceite de girasol forman una mezcla de grasas mono y poliinsaturadas excelentes para nuestra salud. Conozca los beneficios para nuestro organismo:

  • Salud cardiovascular: el contenido de grasas mono y poliinsaturadas aliado a las vitaminas hace que el aceite de girasol sea uno de los más sanos para el consumo, ayudando a disminuir las enfermedades cardiovasculares y la posibilidad de un ataque al corazón;
  • Prevención de la artritis: el aceite presenta propiedades de prevención a la artritis reumatoide;
  • Prevención del asma y el cáncer de colon: la vitamina E suministrada por el aceite de girasol ayuda a prevenir las crisis de asma e incluso el cáncer de colon;
  • Prevención a otros tipos de cáncer: los carotenoides encontrados en ese aceite ayudan a prevenir el cáncer de útero, pulmón y de piel;
  • Reducción del colesterol malo: la proporción de grasas mono y poliinsaturadas y la presencia de la lecitina ayudan a mantener niveles sanos de colesterol bueno y malo;
  • Combate a los radicales libres: la vitamina E y los tocoferoles del aceite de girasol ayudan a neutralizar los radicales libres, moléculas que causan daños celulares y pueden conducir al cáncer;
  • Regeneración de los tejidos: las proteínas de este aceite ayudan en la reparación de los tejidos y también en la producción de hormonas y enzimas;
  • Prevención de infecciones en niños: la barrera protectora formada en la piel con la aplicación del aceite de girasol ayuda a reducir el riesgo de infecciones en bebés prematuros;
  • Salud del sistema nervioso: la concentración de vitaminas del complejo B presente en ese aceite colabora para el buen funcionamiento del sistema nervioso;
  • Reducción de problemas cardíacos y algunos tipos de cáncer: el aceite de girasol contiene selenio, un mineral que ayuda a reducir el riesgo de problemas cardíacos y también de cáncer de pulmón y de piel.

Las ventajas del aceite de girasol son realmente muy significativas, haciendo que sea una opción más interesante que otros aceites como el de coco o almendras. Sin embargo, por tratarse de una grasa, debe ser consumido en pequeñas cantidades.

Y, por supuesto, no recomendamos que inicie o sustituya un tratamiento ya en curso por el aceite de girasol. Para hacer esto con seguridad, siempre es necesario consultar a un médico y asegurarse de que la nueva medida es realmente beneficiosa para su salud.