La ansiedad es una reacción común a todos los seres humanos siendo considerada hasta necesaria para la supervivencia social. Es un sentimiento que acomete a los seres humanos ante una situación de miedo, duda o expectativa.
El problema ocurre cuando esta reacción natural se manifiesta con frecuencia y constancia excesivas, desproporcionales a la normalidad, convirtiéndose en un problema de salud patológico perjudicial para el individuo. Es el llamado trastorno de ansiedad generalizada - TAG.
Investigaciones recientes afirman que la incidencia de la ansiedad patológica en la población mundial es del 25%. Esto significa que una de cada cuatro personas sufre problemas de ansiedad. Se estima que en Brasil el número puede pasar de 50 millones.
Conozca un poco más sobre el trastorno de ansiedad generalizada, sus causas, consecuencias y tratamientos disponibles a continuación.
¿Qué es el trastorno de ansiedad generalizada?
El trastorno de ansiedad generalizada, conocido como TAG es un patrón de preocupación frecuente y constante en relación a diversas actividades y eventos de la vida. Según la psicóloga especialista en Psicología Hospitalaria, Marana Tamie, el trastorno es "caracterizado por una ansiedad y preocupación excesiva frente a pensamientos como: la posibilidad de sufrir un accidente, o en relación al futuro, en la relación con las personas y con situaciones cotidianas , las cuales aparentemente no presentan estar bajo ningún indicativo de amenaza ".
Conozca las causas y los síntomas
Cualquier persona puede desarrollar este trastorno, incluso los niños, pero el problema es más común en las mujeres. Entre las causas del trastorno, se puede citar la predisposición genética, el estrés y los vicios. El problema puede hacerse más evidente en situaciones que involucran conflicto y decisión, como por ejemplo: matrimonio, divorcio, promoción, despido, hospitalización, muerte, nacimiento de hijos y pre-vestibular.
El principal síntoma del trastorno de ansiedad generalizada es la presencia casi permanente de preocupación o tensión, incluso cuando hay pocos motivos o no existe un motivo específico. "Este tipo de preocupación afecta sobremanera, a punto de causar: temblores, insomnio, dificultad para concentrarse, irritabilidad, frecuentes olvidos, aceleración de los latidos del corazón, entre otros", afirma Marana.
Además de las preocupaciones y ansiedades, diversos síntomas físicos también pueden manifestarse, incluyendo tensión muscular y problemas de estómago, como náuseas o diarrea.
Tratamientos disponibles y cuando buscar ayuda
Según Marana, así como otros tipos de trastornos de ansiedad, la Ansiedad generalizada puede ser severa con consecuencias emocionales incapacitantes como por ejemplo "el aislamiento social, con complicaciones que repercuten en el ámbito del trabajo y en la relación con el trabajo la familia ", afirma.
Lo aconsejable es buscar tratamiento antes de que el problema se vuelva crónico. Para diagnosticar el trastorno, el médico realizará un examen físico y mental completo. Se realizarán exámenes para descartar la posibilidad de otras enfermedades o comportamientos que causan síntomas similares. "El tratamiento psicológico está indicado para que la persona pueda manejar su propia ansiedad. Para un caso más grave, es indicado psicoterapia y ayuda farmacológica, este último, sólo hecho por un médico ", afirma la psicóloga.
La recuperación del individuo dependerá de la gravedad de la enfermedad. La mayoría de los pacientes mejora con una combinación de medicamentos y terapia conductual. Pero es importante aclarar que la falta de tratamiento puede traer complicaciones. Si el trastorno no se trata correctamente y en el tiempo adecuado, los cuadros como depresión, pánico y abuso de sustancias pueden ocurrir.
Cómo controlar la ansiedad
Evitar la cafeína y las drogas ilícitas puede ayudar a reducir al mínimo los síntomas de la ansiedad. Un estilo de vida saludable que incluye ejercicios, sueño y buena alimentación son imprescindibles.
Además, es importante que usted reserve un tiempo para hacer lo que le gusta, no asuma demasiados compromisos, coma despacio y sonríe más!