Estudios recientes indican que depresión, pánico, ansiedad y fobia social son disturbios que acomete con más frecuencia y mayor grado de intensidad el sexo femenino.
Entre los trastornos de ansiedad más comunes está la agorafobia, que es el miedo excesivo de estar en un ambiente con gran cantidad de personas. Conozca a continuación un poco más de este trastorno, sus causas y síntomas y cómo tratarlo adecuadamente. La etimología de la palabra Agorafobia deriva de Ágora, que en el griego, se refiere a un espacio, plaza o reunión de personas y de Fobia, que significa miedo de algo. Agorafobia es por lo tanto el miedo de quedarse en un ambiente abierto o cerrado con muchas personas.
El trastorno se caracteriza como una perturbación marcada por un estado de ansiedad exacerbada, que aparece siempre que la persona se encuentra en lugares o situaciones de los cuales sería difícil salir si se sintiera mal, como por ejemplo: túneles, puentes, grandes avenidas, los autobuses, trenes, barcos, fiestas, reuniones de personas. El agorafóbico teme no tener a quien recurrir si se siente mal. Según la psicóloga Marana Tamie, especialista en Psicología Hospitalaria, dicha denominación fue acuñada por Carl Westphal en 1872 y el término es utilizado por la psiquiatría, a veces relacionado con el Síndrome del Pánico y para designar un tipo de trastorno de ansiedad.
Conozca las causas de la agorafobia
Según Marana, varios son los factores que pueden causar la agorafobia. "Entre los investigadores encontramos afirmaciones que el trastorno puede ser iniciado después de un período de duelo, o de necesidad de adaptación, o aún, en una fase tranquila de la vida", afirma ella.
Además, existen investigaciones aún no concluyentes, que asocian los trastornos de ansiedad a una vulnerabilidad biológica o genética. Otra explicación para las causas de la agorafobia es que la misma puede estar asociada a una experiencia desagradable, como estar en un ascensor lleno que se ha vuelto y pasar mal, por ejemplo.
Padres superprotectores cuya educación de los hijos se ha vuelto a los peligros de la vida también pueden ser la causa de comportamientos de esta naturaleza. La agorafobia puede desarrollarse a través de la observación de padres y otros adultos.
¿Cuáles son los síntomas de la agorafobia?
Según el Manual Diagnóstico y Estadístico de las Enfermedades Mentales, los síntomas de la agorafobia se describen como: sensación de ansiedad intensa, aumento de la frecuencia cardíaca y de la presión sanguínea, respiración agitada, sudoración, temblores, sensación de sofocación, falta de aire y náuseas.
Síntomas como el miedo a frecuentar lugares con muchas personas, por ejemplo: bancos, supermercados, teatros y cines también son comunes según Marana. "Algunos pacientes relatan que, además de sentir miedo de frecuentar lugares ocupados, tiene el pensamiento de que hay posibilidad de pasar mal y no tener a quien pedir socorro. Con el sentimiento de angustia, tan intenso, evitan incluso salir de casa ", afirma la psicóloga.
Tratamientos indicados y cuándo buscar ayuda
Como sucede en otros tipos de trastorno de ansiedad, los comportamientos fóbicos pueden existir en niveles variables de persona a persona. "Cuando ese malestar incapacita a la persona, compromete la convivencia social, perjudica sus relaciones familiares, de estudio y de trabajo, la indicación es que se busque un psicólogo, o psicoanalista y para los casos que necesiten de medicación el psiquiatra es recomendado" , señala Marana. No se ha orientado sólo el uso de medicamentos sin el seguimiento de la terapia.
Agorafobia y trastornos de pánico
La relación entre la agorafobia y el pánico es muy cercana. Alrededor de la mitad de los pacientes con síndrome de pánico presentan agorafobia.
